Los demócratas en la Cámara y el Senado presentaron el jueves una legislación para reformar una ley latente durante mucho tiempo que temen que pueda ser utilizada por una futura administración Trump para limitar severamente el aborto o prohibirlo por completo, si el expresidente resulta electo.
La legislación propuesta por la senadora demócrata Tina Smith, de Minnesota, derogaría las disposiciones sobre aborto de la Ley Comstock.
La Ley Comstock de 1873 prohíbe el envío por correo de materiales lascivos, obscenos o que produzcan abortos, aunque no se ha aplicado ampliamente durante décadas.
Mientras la píldora abortiva mifepristona enfrenta desafíos legales, sus defensores temen que un futuro presidente pueda utilizar la Ley Comstock como una herramienta para restringir el acceso al aborto en todo el país, incluso en los estados donde es legal.
“La Ley Comstock es una ley zombi de 150 años de antigüedad que prohíbe el aborto y que durante mucho tiempo ha sido relegada al basurero de la historia”, dijo la senadora Tina Smith, demócrata por Minnesota y líder del proyecto de ley, en un comunicado anunciando la medida.
“Ahora que Trump ha derrocado a Roe, una futura administración republicana podría aplicar mal esta ley Comstock de 150 años de antigüedad para negar a las mujeres estadounidenses sus derechos, incluso en estados donde el derecho al aborto está protegido por la ley estatal”, aseguró Smith.
La representante Becca Balint, demócrata por Vermont, también encabeza una versión del proyecto de ley en la Cámara. “Es hora de que tomemos medidas inmediatas para impedir que los republicanos abusen de la Ley Comstock para erosionar aún más nuestros derechos reproductivos”, dijo en un comunicado.
La interpretación de la ley ha sido limitada por el Congreso a lo largo de los años, y algunos expertos dicen que se ha vuelto obsoleta.
Pero ahora que el histórico fallo Roe vs Wade de la Corte Suprema ha sido revocado, los activistas antiaborto ven una oportunidad en retomar su aplicación para restringir medicamentos abortivos.
Estos activistas, en colaboración con exfuncionarios de la administración Trump, han estado sentando las bases para que la próxima administración republicana aplique la Ley Comstock para evitar el envío por correo de cualquier medicamento y material abortivo, prohibiendo efectivamente todos los abortos sin necesidad de que el Congreso actúe.
Durante los argumentos orales ante la Corte Suprema que cuestionaron los esfuerzos para ampliar el acceso a la píldora abortiva mifepristona, los jueces conservadores Clarence Thomas y Samuel Alito invocaron repetidamente la Ley Comstock.
Alito cuestionó por qué la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) no había desafiado la ley en sus decisiones sobre la ampliación del acceso a la mifepristona por correo.
“Esta es una disposición destacada; no es una subsección oscura de una ley complicada y oscura. Todo el mundo en este campo lo sabía”, dijo Alito.
Un memorando del Departamento de Justicia de la administración Biden de 2022 interpretó la ley como una que prohíbe el envío por correo de artículos solo cuando la persona que los envía sabe que se utilizarán con fines ilegales.
Además, los tribunales inferiores también han dicho que la Ley Comstock solo se aplica a abortos ilegales y no prohíbe la distribución de medicamentos u otros artículos destinados a ser utilizados con fines legales.
Pero los demócratas y la campaña de Biden están llamando la atención sobre cómo una administración Trump y los republicanos del Congreso podrían utilizar la Ley Comstock como parte de su enfoque más amplio sobre los derechos reproductivos antes de las elecciones de noviembre.
Es poco probable que un proyecto de ley de derogación de Comstock avance en el actual Congreso, especialmente porque los republicanos en el Senado han bloqueado proyectos de ley recientes para proteger el acceso a la anticoncepción y la fertilización in vitro.
Pero los demócratas están comprometidos a continuar defendiendo el derecho al aborto y mantenerlo como una cuestión principal del año electoral.
El esfuerzo de los demócratas cuenta con el respaldo de importantes grupos de defensa de los derechos reproductivos, incluida la Federación de Planificación de la Familia de Estados Unidos, la ACLU, el Centro de Derechos Reproductivos y Libertad Reproductiva para Todos, entre otros.
Con información de NBC News y The Hill
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