Un padre de Arizona que se suicidó después de que su hija de 2 años muriera atrapada en un vehículo sobrecalentado había estado encerrando a sus hijos en automóviles estacionados durante más de 10 años, según alegaciones presentadas por su hija adolescente en una demanda por abuso. Christopher Scholtes, de 38 años, habría iniciado esta práctica con una de sus hijas hace más de una década y la mantuvo de manera constante.
“La primera vez que lo hizo fue conmigo cuando tenía menos de 7 años”, declaró la joven de 17 años al medio News 4 Tucson.
Scholtes terminó con su vida el martes por la noche, pocas horas antes de presentarse para cumplir una condena de décadas de prisión por causar la muerte de su hija menor, Parker, al dejarla encerrada en su automóvil durante tres horas en un día con temperatura de 109 grados Fahrenheit (43°C) en Tucson, en julio de 2024.
Mientras la niña permanecía en el interior del vehículo, Scholtes se dedicaba a ver material pornográfico, jugar videojuegos y consumir cerveza dentro de la vivienda.
Su hija de 17 años interpuso la demanda días antes de su deceso, argumentando que él generó un entorno familiar caracterizado por “abuso físico, emocional y psicológico repetido”, lo que derivó en que ella enfrentara depresión y trastorno de estrés postraumático (TEPT). La demanda, fechada el 28 de octubre, lo acusaba de asalto, agresión y maltrato infantil.
Scholtes se había declarado culpable de homicidio en segundo grado en octubre y su sentencia formal estaba programada para noviembre. Su cuerpo fue localizado en una residencia de Phoenix poco después de las 5:00 a.m. del miércoles.
**REDACCIÓN FV MEDIOS**