Hace poco más de un mes, el programa N Investiga presentó un reportaje sobre el Residencial Don Antonio, en San Cristóbal, dentro del programa “Familia Feliz”, una iniciativa del Gobierno lanzada en enero de 2021 para garantizar el derecho a una vivienda digna con 45 proyectos realizados mediante alianzas público-privadas y subsidios.
En ese momento, los residentes denunciaron fallas graves de construcción y una infraestructura muy distinta a la ofertada en los folletos oficiales. Al parecer, no se trata de un caso aislado. Ahora, se recibió una denuncia similar de otro proyecto de este plan: el Residencial “El Trapiche”.
“Si pudiese devolver el tiempo lo haría, porque esto era un sueño que se convirtió en mi peor pesadilla”, dice una beneficiaria del proyecto.
Ubicado en Prado de la Caña, Guerra, el Residencial “El Trapiche” inició su construcción el 26 de mayo de 2022. Contará con edificios para 228 apartamentos desarrollados por RVV Investment SRL, y con una inversión de 500 millones de pesos.
Los apartamentos, de 47 metros cuadrados, tienen precios que oscilan entre 1 millón 900 mil y 2 millones 250 mil pesos.
“Se dio un inicial de 65 mil pesos por 20 años. Se paga 17 mil pesos, más el bono que otorga el Ministerio de la Mujer para el primer apartamento, que son 4 mil pesos. Aún estamos a la espera de otros bonos que tampoco han entregado”, agrega la beneficiaria.
Como parte de las instalaciones prometidas, se incluye agua potable, sistema de drenaje pluvial, estacionamientos e iluminación general.
Sin embargo, según los denunciantes, la situación requiere una intervención urgente. La empresa sigue construyendo sin corregir errores de los bloques anteriores; las calles se inundan, los materiales son de mala calidad, y las tuberías están inconclusas o mal instaladas, reventándose fácilmente por la presión del agua.
“Esto ya no puede ser. El salitre se come la llave del baño. Esa llave se tuvo que cambiar en un mes y ya la está arruinando”.
Las estructuras son vulnerables, con paredes agrietadas y débiles a simple vista. El mirador está sin terminar. El parqueo para motos sigue inconcluso. No existen llaves de paso independientes para cada edificio.
Se ha tenido que suspender el suministro de agua para todo el proyecto a fin de reparar problemas con las tuberías. Las puertas de las azoteas y accesos a los edificios están desniveladas por el mal acabado de las mochetas. Drenajes y desagües desembocan en jardines y áreas comunes, provocando charcos en zonas verdes y en estacionamientos. Las llaves de las puertas son de muy mala calidad. La jardinería y las áreas verdes permanecen inconclusas.
“Esto se pintó como si fuera una maravilla, sin problemas, como me dijeron cuando compré el apartamento. Pero ahora que vivo aquí, siempre hay problemas: con el agua, con olores desagradables, es un sufrimiento constante”, continúa Johana, una de los beneficiarios.
El desecho de aguas negras está a pocos metros de los apartamentos, obligando a los residentes a convivir con residuos, gusanos y el violento olor que despiden. En algunos edificios, los baños son inservibles porque el pozo séptico está tapado y las heces no pueden drenar adecuadamente. Esta situación ha provocado que el olor fétido se disperse en toda el área, afectando gravemente la calidad de vida de los habitantes.
Al buscar sobre RVV Investment SRL, constituida en 2019, sus representantes son Andrés Paíno Henríquez Dájer, hermano del actual ministro de Medio Ambiente Armando Paíno Henríquez, que en el momento de la entrega de los primeros apartamentos era el primer director ejecutivo de DO Sostenible, y quien fue designado por el presidente Luis Abinader antes de que esta institución se estableciera oficialmente como el Fideicomiso Público-Privado para la Gestión Integral de Residuos Sólidos en la República Dominicana.
El segundo socio registrado es Manuel Rafael del Carmen Rodríguez Núñez.
Sin embargo, públicamente, en documentos del MIVED y notas de prensa, el representante de RVV Investment SRL es George Jean Awad Kushner, quien también es cuñado del ministro Paíno Henríquez, ya que es esposo de su hermana Armidis del Pilar Henríquez de Awad, directora administrativa y financiera de la Superintendencia de Electricidad, y fue la persona que estuvo en la inauguración con el presidente Abinader. En junio de 2023 se inauguraron los primeros 48 apartamentos.
Al indagar en otros contratos de la empresa con el Estado, usando su RNC en la plataforma de Contrataciones Públicas, RVV Investment SRL aparece sin ningún contrato vigente. Fuera de esa página, únicamente figura en listas de fideicomisos para proyectos del Ministerio de Vivienda. Estos proyectos bajo alianza público-privada no se someten a licitaciones.
Pero uno de los socios de la empresa, Manuel Rafael del Carmen Rodríguez, está relacionado con el fideicomiso de viviendas y garantías VBC Doña Luz, un conjunto de edificios de 4 niveles, 256 apartamentos que promete tener destacamento, supermercados, dos escuelas, bancos, hospitales, y por supuesto, área de estacionamiento, áreas verdes y suministro de agua potable. También es un proyecto del MIVED a ejecutarse en Santo Domingo Este, justo al lado del Residencial “El Trapiche”.
La ley
El artículo 14 de la Ley 340-06 establece la prohibición absoluta de contratar con el Estado a ciertos funcionarios (presidente, vicepresidente, ministros, viceministros, directores generales, entre otros), pero también a sus parientes directos hasta segundo grado de consanguinidad y afinidad, salvo excepciones muy específicas.
Aunque un fideicomiso público-privado pueda estructurarse con mayor flexibilidad, sigue siendo una relación contractual con el Estado, porque los recursos públicos están involucrados y el fin es una obra pública.
Pero cuando se firmó el contrato en diciembre 2021, entre el Banco de Reservas y el fidecomiso público privado, los lazos familiares no eran un impedimento, porque ninguno de los hermanos eran funcionarios.
El monto total de los bonos (Bono-Inicial, Bono-Itbis y Bono-Tasa Siete Años y más bono del Ministerio de la Mujer) representa una inversión estatal de unos 100 milones pesos solo en subsidios.
A pesar de que en el contrato de venta la constructora RVV Investment SRL se comprometió a “mantener la calidad de las viviendas construidas en este residencial”, las casas presentan un deterioro constante que ha impactado la vida de los propietarios.
“Aquí hicieron un hoyo que yo misma tuve que tapar con cemento”, destaca la beneficiaria.
En los contratos de venta aparece el nombre y la firma de Andrés Paíno Henríquez como constructor responsable de esta obra, que ha dejado a decenas de familias decepcionadas.
Después de más de un año de firmar el contrato, la constructora parece haber abandonado totalmente sus responsabilidades, lo que ha generado un deterioro progresivo y alarmante en las paredes de los apartamentos y en las áreas comunes, que ahora se caen a pedazos, poniendo en grave riesgo la seguridad y bienestar de las familias que viven allí.
Lo que en un inicio fue el sueño anhelado de tener un hogar digno y ser parte de una “familia feliz” se ha convertido en una realidad angustiante y desoladora, marcada por la frustración, el abandono y la constante incertidumbre sobre la estabilidad de sus viviendas.
La falta de mantenimiento, la negligencia y los incumplimientos han transformado este proyecto en una pesadilla que afecta no solo la estructura física, sino también la tranquilidad y esperanza de quienes confían en este programa social.