La repentina muerte de Adrián Olivares, exintegrante del grupo Menudo, dejó conmocionado al mundo de la música, no solo porque perdió la vida siendo aún muy joven, tenía 48 años de edad; sino porque fue muy poco lo que se reveló al respecto.
Olivares, falleció este pasado 8 de julio, y los encargados de confirmar la noticia fueron sus excompañeros de grupo, Robert Avellanet y Sergio Blass, quienes, a través de las redes sociales, publicaron algunos mensajes de despedida e imágenes de los momentos que vivieron con el cantante.
Sin embargo, y a pesar de los rumores sobre complicaciones con una cirugía gástrica, las causas del deceso se mantenían en completo hermetismo… hasta ahora, pues fuentes cercana a la familia han salido a la luz nuevos detalles.
Fue a través de la plataforma GoFundMe que una mujer identificada como Diana Faget reveló que el hermano de Karla Souza padecía una rara enfermedad crónica, misma que al combinarse con una lesión interna, terminó por arrebatarle la vida.
“Nuestro querido Adrián Olivares falleció inesperadamente a las 5:30am del día de hoy (Julio 8). Tenía 48 años. Fue diagnosticado hace una semana con enfermedad de Crohn y se le complicó con una colitis ulcerada“, se puede leer en el texto publicado.
Asimismo, detalló que a Adrián le sobreviven tres hijas pequeñas, por lo que, además, solicitó la ayuda económica de los fans y el público en general, para cubrir los gastos funerarios del músico, ya que, aseguró, la familia no cuenta con los recursos necesarios.
“La familia no tiene los medios (económicos) para darle a Adrián su último adiós y ayudar a sus hijas con todos los gastos necesarios. Todas las donaciones se entregarán a su madre, Natasha”, finalizó Faget.
Cabe destacar que, hasta el momento, se han juntado más de 14 mil de los 20 mil dólares que se impusieron como meta; pero los familiares, incluyendo a Souza, se han pronunciado al respecto.
¿QUÉ ES LA ENFERMEDAD DE CROHN?
De acuerdo con la Clínica Mayo, la enfermedad de Crohn es un tipo de padecimiento intestinal inflamatorio, que provoca la hinchazón de los tejidos del tracto digestivo, causado, a su vez, malestares como dolor abdominal, diarrea grave, cansancio, pérdida de peso y malnutrición.
Esta enfermedad “puede ser dolorosa y debilitante, y, en algunos casos, llevar a complicaciones que pueden poner en riesgo la vida”.
Hasta ahora no existe una cura, pero con terapias y tratamientos se pueden reducir considerablemente los síntomas y lograr una remisión a largo plazo.