El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, expresó su respaldo contundente a la Policía y a las Fuerzas Armadas ante las denuncias de presuntas violaciones a los derechos humanos, emitidas por diversas organizaciones en relación con las intervenciones a las cárceles controladas por bandas criminales.
Durante su llegada al aeropuerto Eloy Alfaro de la ciudad costera de Manta, Noboa elogió el arduo trabajo desempeñado por los miembros de las fuerzas de seguridad desde que se declaró la “guerra” interna contra la criminalidad organizada para contrarrestar la escalada de violencia generada por las bandas criminales, a las que catalogó como grupos terroristas, reseñó la agencia de noticias Efe.
“Nuestros hombres y mujeres están restaurando la paz incansablemente gracias a los golpes contundentes contra el crimen organizado”, destacó el mandatario ecuatoriano, quien subrayó que su país enfrenta actualmente “una de las batallas más difíciles de su historia”.
Asimismo, reafirmó su compromiso de defender la integridad y el honor de las Fuerzas Armadas y la Policía. De esta forma, rechazó las acusaciones de sectores que tachan sus acciones como violatorias de los derechos humanos.
“No permitiremos que voces ‘antipatria’ cuestionen nuestra labor, cuando lo que estamos haciendo es proteger los derechos de la mayoría”, manifestó.
Investigarán presuntas torturas
Una investigación ordenada por un juez del país puso en tela de juicio algunas prácticas durante las operaciones en las cárceles.
El magistrado constitucional Manuel Peña solicitó a la Defensoría del Pueblo indagar en un plazo de 45 días posibles acciones de tortura por parte de militares en las instalaciones penitenciarias, tras una solicitud presentada por el Comité de Familiares por Justicia en Cárceles.
La resolución del juez también insta a garantizar atención médica continua a los reclusos y a brindar seguimiento a su salud mental. Además, hace un llamado a las Fuerzas Armadas para que actúen en estricto apego a la ley y respetando la dignidad de las personas privadas de libertad.
En medio de estas investigaciones, la Fundación Regional de Derechos Humanos recordó la responsabilidad del Estado en la protección de los derechos de los detenidos y subrayó que el control de la violencia por parte de las autoridades no justifica actos de tortura ni violaciones de los derechos humanos.
Las operaciones de las fuerzas de seguridad en las cárceles han suscitado comparaciones con escenas similares ocurridas en El Salvador, donde los pandilleros apresados han sido tratados de manera similar.
Desde el inicio del “conflicto armado interno” declarado en Ecuador, las fuerzas del orden han detenido a más de 8,000 personas, mientras que ocho presuntos delincuentes han sido ultimados, según reportes oficiales, señalados por la agencia Efe.
La investigación sobre la muerte de un ciudadano colombiano durante un enfrentamiento armado está en curso por parte de las autoridades pertinentes.
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