Cuatro de los siete jueces de la Corte de Apelaciones de Nueva York encontraron que el juicio contra Harvey Weinstein tenía vicios procesales porque se permitió testificar a mujeres que no hacían parte del caso.
Al respecto, la juez Jenny Rivera calificó los errores de “enormes” y dijo que la solución sería un nuevo juicio en el que los que acusan a Weinstein puedan volver a testificar.
“Un grave paso atrás”
En un comunicado, Douglas H. Wigdor, un abogado que representa a ocho acusadores de Weinstein, criticó la decisión y dijo que «es un grave paso atrás para judicializar a los responsables de violencia sexual». Además, dijo que “es común que los tribunales admitan pruebas de otros actos no imputados”, y que “ayuden a los jurados a comprender cuestiones relativas a la intención, el modus operandi o el plan del acusado».
Weinstein, de 72 años, ha estado cumpliendo una sentencia de 23 años en una prisión de Nueva York tras su condena por cargos de acto sexual delictivo por practicar sexo oral a la fuerza a una asistente y por violación en tercer grado por un ataque a una actriz en 2013.
El exproductor de cine, quien ha estado detenido bajo custodia semi protegida en el Centro Correccional Mohawk en Syracuse, tiene diabetes, problemas oculares y cardíacos, y utiliza un andador cuando asiste a la corte.