La tinta del contrato ya está más que seca: en octubre de 2024, Toyota y Haas alcanzaron un acuerdo para una asociación técnica en la Fórmula 1. Sin embargo, la colaboración va más allá de lo que inicialmente se pensaba: entre la marca japonesa y el equipo estadounidense se está formando una cultura única.
Haas llevará a cabo los esperados test TPC (Testing of Previous Cars) en Fuji los días 6 y 7 de agosto de 2025. El primer día, el piloto japonés de pruebas Ryo Hirakawa se subirá al VF-23, un monoplaza con dos años de antigüedad. El 7 de agosto será el turno del actual campeón de la Super Fórmula, Sho Tsuboi.
Toyota también está presente en el coche del equipo de Gene Haas, ya que el logotipo de Toyota Gazoo Racing (TGR) adorna el monoplaza actual de la categoría reina. Además, en las pruebas suelen participar pilotos de Toyota: Kazuki Nakajima, Kamui Kobayashi, Ritomo Miyata y, por supuesto, Hirakawa y Tsuboi.
Toyota observa las evoluciones
El jefe de automovilismo de TGR, Masaya Kaji, está implicado en el programa y ya declaró en enero de 2025: “Estamos observando la tecnología actual y lo que llegará en 2026. La Fórmula 1 avanza lentamente hacia una dirección que es valiosa para Toyota”. No obstante, con un posible regreso de motores V8 o V10 con combustible sostenible, algunas innovaciones se verían reducidas.
“Todavía hay incertidumbre sobre las unidades de potencia, así como discusiones y nuevas reglas. No es el momento adecuado para que hagamos comentarios al respecto”, afirma Kaji. “Aun así, creo que la élite del automovilismo debe representar también la sostenibilidad y la innovación técnica”.
“La Fórmula 1 tendrá en cuenta estos factores cuando se tomen decisiones”, confía Kaji. “No creo que un fabricante continúe si no se persiguen estos valores”.
Innovación y sostenibilidad, claves
Toyota cree en la Fórmula 1 y en su camino de mantener la innovación y la sostenibilidad en el centro de su desarrollo. Por eso, la marca japonesa sigue muy de cerca la evolución de la categoría reina. Sin embargo, no está profundamente implicada, ya que no suministra ni motor ni chasis. Aun así, Kaji considera a Toyota un socio importante para Haas, con el que compiten juntos en Fórmula 1.
“Actualmente nos centramos en construir un equipo fuerte junto a Haas”, añade Kaji. “Eso no cambiará en el futuro. Avanzamos paso a paso, y creo que pronto veremos los resultados. La gente los notará. Es fantástico, porque estamos contribuyendo a crear una cultura común”.
Kaji habla de “un solo equipo” que “está codo con codo”. “Todo el equipo Haas es proactivo, muy positivo y busca trabajar con nosotros. Estamos muy agradecidos y esperamos que siga siendo así”.
Colaboración en muchos niveles
Con Ayao Komatsu, Haas cuenta con un jefe de equipo que vive la cultura japonesa. Él también subraya que Haas “compite oficialmente con Toyota en la Fórmula 1”. “Gracias a esta iniciativa conjunta lo hemos conseguido”, añade Komatsu. “En enero realizamos un test TPC en Jerez que no habría sido posible sin Toyota”. Según el responsable, la cooperación con los japoneses ya está dando frutos.
“Actualmente, Haas y Toyota están construyendo una cultura de equipo”, explica Komatsu. “Estamos creando un equipo juntos. Es algo fantástico. Yo no represento a un fabricante y no puedo decir lo que significa para ellos, pero la Fórmula 1 es un campeonato mundial y la innovación técnica y la sostenibilidad son aspectos clave. Esto incluye la introducción de combustible sostenible y la mejora de la eficiencia de la unidad de potencia”.
Según Komatsu, un desarrollo así solo es posible con la implicación de los fabricantes. “Económicamente, la Fórmula 1 está en un gran momento y los equipos se benefician de ello”, comenta el jefe de equipo. “Los fabricantes de motores tienen que hacer grandes inversiones y no siempre reciben el mismo retorno económico”.
Esto, añade, es un asunto para la Comisión de F1. “Como equipo, valoramos mucho el trabajo de los fabricantes de motores”, asegura. “Gracias a ellos tenemos este nivel de desarrollo técnico. Estamos debatiendo a largo plazo cómo hacer que la Fórmula 1 sea valiosa no solo para los equipos, sino también para los fabricantes y otros socios. La Fórmula 1 debe convertirse en una categoría en la que los fabricantes digan: ‘Merece la pena estar aquí’”.
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