Comité asesor de EE. UU. rompe consenso histórico y limita vacuna de hepatitis B en recién nacidos

0
50


El Comité Asesor sobre Prácticas de Inmunización (ACIP) sorprendió este viernes al votar por revertir la recomendación federal que durante más de tres décadas indicaba vacunar a todos los recién nacidos en Estados Unidos contra la hepatitis B. La decisión, adoptada por mayoría de 8-3, propone aplicar la dosis al nacer solo a bebés cuyas madres den positivo al virus o no hayan sido examinadas.

La medida, impulsada por el panel renovado este año por el secretario de Salud Robert F. Kennedy Jr., conocido previamente por su activismo antivacunas, generó un rechazo inmediato entre médicos y expertos en salud pública, quienes calificaron el cambio como un grave retroceso en la prevención de una enfermedad potencialmente mortal.

“Estamos haciendo daño al modificar esta recomendación”, advirtió el doctor Cody Meissner, uno de los miembros del ACIP que votó en contra. La comunidad médica teme que esta decisión revierta décadas de progreso: desde 1991, la vacunación universal al nacer redujo drásticamente los casos infantiles de hepatitis B en el país.

El nuevo lineamiento plantea que, si los padres optan por no vacunar al bebé al nacer, la serie de inmunización comience a los dos meses. Sin embargo, varios especialistas cuestionaron esta postura y señalaron que no existe evidencia científica que respalde retrasar la primera dosis. “Esto es inconcebible”, criticó el doctor Joseph Hibbeln durante la tensa reunión de dos días.

Lee: CPI abre la puerta a avanzar casos contra Putin y Netanyahu sin su presencia

Los defensores de la vacunación universal recuerdan que la hepatitis B puede causar infecciones crónicas, cáncer de hígado y cirrosis, especialmente cuando se adquiere en los primeros meses de vida. Aunque los adultos se contagian por vía sexual o mediante agujas contaminadas, el virus también puede transmitirse de madre a hijo durante el parto.

El cambio del ACIP también despertó inquietud por las crecientes influencias antivacunas. Desde junio, Kennedy reemplazó a los 17 miembros del panel por un grupo que incluye figuras abiertamente escépticas de las vacunas. Además, el formato de las reuniones alteró su rigor histórico: los científicos de los CDC ya no presentan datos técnicos, y los espacios se han cedido a voces con posiciones contrarias a la evidencia, según denunciaron varias organizaciones.

Te podría interesar:

“La reunión de esta semana fue una escena del crimen epidemiológico”, condenó Elizabeth Jacobs, del grupo Defend Public Health, al cuestionar la desviación del comité respecto al consenso médico.

Otra de las propuestas aprobadas, sugerir pruebas de anticuerpos para evaluar si la vacuna hizo efecto,  también generó críticas. Expertos de los CDC señalaron que esta práctica no es estándar, puede producir resultados inconsistentes y no existe evidencia que indique que menos dosis serían suficientes.

La decisión final ahora queda en manos del director interino de los CDC, Jim O’Neill, quien deberá decidir si adopta o rechaza las nuevas recomendaciones. Legisladores como el senador Bill Cassidy pidieron frenar el cambio, advirtiendo que podría aumentar nuevamente los contagios infantiles: “Este error hará que Estados Unidos esté más enfermo”.





Source link