Santo Domingo.- Las autoridades del Cementerio Cristo Salvador esperaron el Día de las Madres en las mismas pésimas condiciones que desde hace años impera en este camposanto, ubicado en el Sector San Luis, en Santo Domingo Este.
Ni siquiera porque se aproximaba la celebración de las madres, donde cientos de dominicanos acuden a las tumbas de sus progenitoras, el Ayuntamiento de Santo Domingo Este acondicionó el cementerio.
Deterioro, abandono, malezas, la falta de asfalto y el lodo, son las características que describen las condiciones en que se encuentra actualmente el Cementerio Cristo Salvador.
Este cementerio, famoso desde hace años por su mal estado, continúa hoy inundado de hierbas. Los caminos que conducen a los nichos se han convertido en matorrales, donde la maleza cubre casi la totalidad muchas tumbas y cruces.
Hoy este camposanto está abarrotado de personas que acuden al lugar para llevarles flores y prenderles velones y velas a sus seres queridos en especial a las madres.
Sin embargo, por las malas condiciones del panteón, muchos ciudadanos no encontraban las tumbas de sus familiares. “Aquí hay espacios que ni siquiera tienes por donde caminar de la cantidad de hierbas que hay”, expresó la joven Wendy Santana, quien acudió al cementerio a visitar la tumba de madre.
Indignante es ver como un lugar destinado a sepultar a seres queridos se transformó en un «monte», donde cualquiera que vaya a visitar las lápidas de sus parientes pudiera resultar asaltados por desaprensivos sin que nadie se diera cuenta.
Tumbas profanadas, destruidas y llenas de basura, también se observan en ese camposanto. El equipo de elCaribe trató de conversar con el administrador general del Cementerio Salvador sobre las condiciones del lugar. Pero, a las 10:30 de la mañana de ayer, empleados informaron que Virgilio Ureña ya se había marchado del camposanto.
El equipo de este medio siguió recorriendo el cementerio y a medida que seguía entrando al lugar, el panorama del camposanto se reducía a malezas que empantanan los nichos y las calles.
Un grupo de hombres con pala en manos aprovecharon al máximo el “Día de las Madres” para ser contratados por los visitantes que antes de depositar las flores y velones les pagaban a los trabajadores para que desherbara las tumbas.
Para Luis Campusano, el principal problema del cementerio es la falta de higiene, y asegura que por las condiciones del lugar los visitantes están expuestos a ser asaltados.
Decenas acuden a cementerios por Día de las Madres
Con flores en manos y con la mente plagada de recuerdos, decenas de ciudadanos acudieron a los cementerios de la capital para honrar al único ser capaz de reproducir la vida: la madre.
Así con la voz entre cortada María Camacho, responde al recordar a su madre sepultada en el Cementerio Nacional Máximo Gómez, pese al lago tiempo de haber partido del espacio terrenal.
Como ella, muchos dominicanos no encuentran palabras para describir a sus progenitoras al celebrar este fin de semana el Día de las Madres.
A diferencia del Cementerio Cristo Salvador, el camposanto de la Máximo Gómez, se encuentra limpio y con una buena vigilancia.
“Tengo muchos años viniendo al cementerio donde está enterrada mi madre, mi madre y mi sobrina y las últimas veces que vengo todo siempre está muy limpio”, resaltó María Camacho.
