Cerca de las 11:00 de la noche del lunes 6 de octubre, Wendy Alcántara recibió una llamada que cambiaría su vida para siempre. Su hijo, Christopher Yunior Alcántara, de 27 años, había sido víctima de un ataque violento frente a su residencia en el sector Brisa de Caucedo, Boca Chica, Santo Domingo. El crimen fue perpetrado por sujetos no identificados que se desplazaban en un automóvil gris sin matrícula.
Horas antes del trágico suceso, Christopher había visitado el hogar de su madre para lavar su ropa y uniforme laboral, pues al día siguiente debía presentarse a sus labores en un supermercado local, donde trabajaba desde hacía dos años como empleado de almacén.
Wendy recuerda con nostalgia que le preparó un jugo, acompañado de pan con queso y galletas. Compartieron una conversación antes de que él se despidiera. Más tarde, Christopher la llamó para solicitarle que estuviera pendiente por si llovía, con el fin de resguardar la ropa que había tendido. Este gesto cotidiano se convertiría en uno de sus últimos recuerdos.
Posteriormente, el joven fue a recoger a su abuela, con quien convivía, y ambos regresaron a la vivienda. Cerca de las 11:00 de la noche, uno de sus amigos llegó para conversar. Se sentaron en la galería y minutos después se les unió otro conocido.
En ese momento, un automóvil gris pasó lentamente frente a la casa. Los testigos lo observaron y comentaron que les parecía extraño. Según el relato de Wendy, los jóvenes mencionaron que el vehículo resultaba sospechoso, pero Christopher aseguró que no tenía problemas con nadie.
Repentinamente, el automóvil se detuvo y tres individuos descendieron, abriendo fuego sin mediar palabra. Christopher recibió múltiples impactos de bala y fue auxiliado de inmediato por vecinos, quienes lo trasladaron al hospital. Lamentablemente, falleció minutos después de su llegada, mientras que sus acompañantes lograron huir del lugar.
Wendy manifestó con profundo dolor que su hijo era un joven sereno, comprometido con su trabajo y sin conflictos aparentes. El Departamento de Investigaciones Criminales (Dicrim) informó que el caso permanece bajo investigación activa. Los agentes revisan las grabaciones de las cámaras de seguridad de la zona para identificar el vehículo involucrado, aunque hasta el momento no se ha logrado determinar su matrícula ni se han efectuado arrestos.
Se confirmó que uno de los jóvenes que acompañaba a la víctima fue interrogado, mientras que el otro no ha comparecido ante las autoridades. Según el testimonio de Wendy, personal médico del hospital indicó que este no es el primer incidente violento registrado en la zona con personas a bordo de un automóvil gris sin matrícula.
**REDACCIÓN FV MEDIOS**