Carla Peralta, madre de 22 años, se presentó ante el Ministerio Público para solicitar una orden de alejamiento y manutención contra el padre de sus dos hijas. Esta acción judicial ocurre cinco meses después de su separación, cuando el padre interpuso una orden de alejamiento en su contra, según relata Peralta.
**La difícil relación y las causas de la separación**

El conflicto entre la pareja se originó tras un incidente ocurrido en horas de la madrugada, cuando Carla, después de recibir una llamada informando que su expareja estaba con otra persona mientras cuidaba a las niñas, reaccionó dañando un colchón prestado. Peralta señala que su relación comenzó cuando ella tenía 13 años y su pareja era mayor de edad, lo que marcó una relación complicada con momentos violentos. Según su testimonio, las agresiones físicas por parte de quien fuera su compañero le causaron pérdidas dentales y lesiones manuales recurrentes durante los casi nueve años de convivencia.
Durante la separación, Carla explica que su expareja mostraba una conducta distanciada del hogar, dejando a sus hijas y a ella en momentos vulnerables sin la contribución económica necesaria. El padre acusa a Carla de comportamiento negligente, afirmando que consume sustancias en presencia de las menores, acusaciones que Peralta rechaza firmemente.
**Situación actual y la búsqueda de protección legal**
Las dos niñas, de cinco y tres años respectivamente, se encuentran ahora en una situación desafiante. Carla tiene a la menor bajo su cuidado, mientras que la mayor fue llevada por su padre hacia la capital, sin que ella conozca el lugar específico. Reubicada con su hija menor en la casa de su madre, Carla enfrenta la incertidumbre sin empleo fijo, contando con el apoyo materno en el cuidado de la pequeña.
A pesar de tener una orden de alejamiento vigente contra ella, Carla denuncia que el padre de las menores continúa apareciendo en la residencia actual, justificándose con visitar a su hija menor. Esta situación ha llevado a Peralta a reiterar su solicitud al Ministerio Público no solo para la imposición de una orden de alejamiento, sino también para establecer una pensión de manutención que garantice el bienestar de las niñas. Además, ha expresado su deseo de recuperar el contacto regular con su hija mayor y asegura que su principal preocupación es el bienestar de ambas.
Las autoridades enfrentan el reto de atender el llamado de Carla y coordinar los procedimientos judiciales pertinentes para asegurar que se cumplan las medidas de protección necesarias. Se espera que el Ministerio Público, en colaboración con organismos sociales, implemente las medidas que garanticen el resguardo de la familia.
**REDACCIÓN FV MEDIOS**


