Biografía de Francisco del Rosario Sánchez #FVDigital

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Francisco del Rosario Sánchez (Santo Domingo, 9 de marzo de 1817 – San Juan de la Maguana, 4 de julio de 1861) fue un abogado, militar y político dominicano, considerado uno de los Padres de la Patria junto a Juan Pablo Duarte y Ramón Matías Mella. Su liderazgo y sacrificio fueron fundamentales en la independencia y la consolidación de la soberanía nacional.

Orígenes y formación de Francisco del Rosario Sánchez

Sánchez nació durante el periodo conocido como «España Boba», una época de crisis política y económica en la parte oriental de la isla. Era hijo de Olaya del Rosario Belén, de ascendencia criolla, y de Narciso Sánchez Ramona, descendiente de esclavos. Su infancia estuvo marcada por la influencia de su madre y su tía, María Trinidad Sánchez, quienes le inculcaron valores de justicia y patriotismo. Desde temprana edad mostró talento para la música y las letras, estudiando con destacados maestros de la época como el sacerdote Gaspar Hernández y el maestro de filosofía Nicolás Lugo. Además, aprendió latín, inglés y francés, convirtiéndose en un autodidacta destacado.

Ingreso al movimiento independentista

A pesar de no ser fundador de La Trinitaria, Sánchez se convirtió en una figura clave dentro del movimiento independentista liderado por Duarte. Tras la persecución de los trinitarios por parte del gobierno haitiano en 1843, Duarte fue exiliado y Sánchez asumió el liderazgo de la conspiración. Organizando y movilizando recursos, lideró el proceso que culminó con la proclamación de independencia el 27 de febrero de 1844. Aquella noche, Sánchez izó por primera vez la bandera dominicana en la Puerta del Conde, pronunciando el lema «Dios, Patria y Libertad».

Primeros años de la independencia y exilios

Tras la independencia, la división entre liberales y conservadores afectó la estabilidad política del país. Sánchez fue nombrado presidente provisional de la Junta Central Gubernativa, pero en menos de 24 horas cedió el cargo a Tomás Bobadilla, representante del sector conservador. Poco después, Pedro Santana tomó el poder, declaró a los trinitarios traidores y los desterró. Sánchez fue exiliado en Curazao, donde vivió con dificultades económicas. Regresó en 1848 tras la amnistía del presidente Manuel Jimenes, ocupando cargos en el gobierno, pero nuevamente fue desterrado por la influencia de Santana.

Lucha contra la anexión a España

En 1861, al enterarse de la intención de Pedro Santana de anexar la República Dominicana a España, Sánchez inició un movimiento para impedirlo. Desde su exilio en San Tomás, organizó una expedición con apoyo de Haití, cruzando la frontera con un grupo de patriotas. Antes de partir, pronunció su emblemática frase: «Entro por Haití porque no puedo hacerlo por otra parte, pero si alguien pretendiese mancillar mi nombre por eso, decidle que yo soy la Bandera Nacional».

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Sin embargo, su expedición fue traicionada por colaboracionistas del gobierno anexionista. Fue capturado en El Cercado el 20 de junio de 1861 y llevado a San Juan de la Maguana, donde fue sometido a un juicio farsa y condenado a muerte.

Muerte y legado

El 4 de julio de 1861, Sánchez y sus compañeros fueron fusilados en el camposanto de San Juan. Sus últimas palabras fueron: «Diga a los dominicanos que muero con la patria y por la patria, y a mi familia que no quiera vengar mi muerte».

Su sacrificio generó un sentimiento de resistencia que, dos años después, daría inicio a la Guerra de la Restauración (1863-1865), que culminó con la expulsión de las fuerzas españolas y la restauración de la soberanía dominicana.

Reconocimientos y memoria histórica

Hoy, Francisco del Rosario Sánchez es recordado como un héroe inmortal. Sus restos descansan en el Altar de la Patria en Santo Domingo, junto a los de Duarte y Mella. En su honor, numerosas calles, escuelas y monumentos llevan su nombre. Su imagen aparece en el billete de 100 pesos dominicanos y en la moneda de 5 pesos. Además, su valentía ha sido exaltada en canciones y poesías patrióticas, consolidándolo como un símbolo de lucha y sacrificio por la independencia de la República Dominicana.



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