Bronx, Nueva York. Una celebración comunitaria que se desarrollaba en un ambiente colorido y alegre terminó abruptamente en medio de una situación de tensión este domingo 27 de julio. Los hechos ocurrieron al finalizar la parada en la avenida Grand Concourse, específicamente entre las calles 170, Elliot Play y Mercy Play, cuando se registraron actos de violencia que dejaron como resultado a cuatro jóvenes heridos.
Testigos que se encontraban dentro de un establecimiento cercano relataron que el bullicio habitual del evento fue interrumpido por un sonido que muchos confundieron con fuegos artificiales. Sin embargo, rápidamente se percataron de que se trataba de una detonación. “Yo escuché un proyectil nada más… luego vi a una señora tirada en el piso”, narró una residente que observó lo ocurrido desde adentro del local, donde incluso fue necesario limitar el ingreso por la cantidad de personas que intentaban refugiarse.
Los hechos se desarrollaron en esquinas distintas del mismo bloque, pero ocurrieron en un intervalo corto de tiempo, lo que generó una rápida movilización policial. Según testigos, una discusión entre varios individuos derivó en el uso de un objeto de fuego, lo que ocasionó la dispersión inmediata del público asistente. Las sirenas de patrullas y ambulancias interrumpieron la música festiva y marcaron un abrupto cambio en la atmósfera del evento.
Uno de los heridos era un visitante proveniente de Atlantic City, quien había llegado al Bronx con la intención de disfrutar la parada. Ninguno de los nombres de los afectados ha sido divulgado hasta el momento, y las autoridades tampoco han informado detalles específicos sobre el motivo de los enfrentamientos. No obstante, se confirmó que los cuatro jóvenes fueron trasladados a un hospital del área, donde se encuentran recibiendo atención médica y muestran señales de recuperación.
El incidente ha generado preocupación entre organizadores y comerciantes locales, quienes se han sumado al llamado por una mayor presencia de seguridad y promoción de la responsabilidad ciudadana durante eventos públicos. “La vida es una sola y todo tiene consecuencias”, afirmó una vecina mientras limpiaba los restos del desorden frente a su negocio.
La Policía de Nueva York continúa investigando los hechos y revisando las grabaciones de cámaras de vigilancia instaladas en comercios del área. Además, han solicitado la colaboración de la ciudadanía para aportar cualquier información que contribuya a esclarecer lo ocurrido. La comunidad del Bronx permanece atenta al desarrollo de la investigación, en medio de un sentimiento general de reflexión sobre la necesidad de preservar el bienestar colectivo durante las celebraciones locales.