Rusia ha iniciado la producción en masa de refugios antibombas móviles. Servirán para proteger contra la radiación nuclear, las ondas de choque y los desastres naturales. No es una información secreta que haya desvelado algún medio occidental. El anuncio lo ha hecho el propio régimen a través del Ministerio de Situaciones de Emergencia de Rusia y coincide con el aumento de la tensión en la guerra entre Rusia y Ucrania.
Después de que tropas de Corea del Norte se sumaran en el frente al Ejército ruso, el presidente de EEUU, Joe Biden, autorizó a Volodímir Zelenski a usar misiles de largo alcance made in USA para atacar territorio ruso. En respuesta, Vladimir Putin ha aprobado la nueva doctrina que permite respuestas con armamento nuclear ante ataques convencionales que amenacen la soberanía de Rusia y Bielorrusia.
En ese preocupante contexto, el Instituto Panruso de Investigación para la Defensa Civil y las Emergencias (del Ministerio ruso de Situaciones de Emergencia) informó este lunes del inicio de la producción en serie del refugio móvil KUB-M.
“Protege a las personas de diversas amenazas, incluidas catástrofes naturales e incidentes provocados por el hombre“, asegura la organización en un comunicado. La producción seriada de este refugio se ha iniciado en la ciudad de Dzerzhinsk, en la región de Nizhni Nóvgorod.
Características del KUB-M
El refugio estándar tiene aspecto de contenedor de carga y consta de dos módulos: una habitación para 54 personas y un bloque técnico. La capacidad del refugio puede aumentarse con módulos adicionales.
La principal ventaja del KUB-M es su movilidad. El refugio puede transportarse fácilmente a un nuevo emplazamiento por carretera o ferrocarril y conectarse a los sistemas de ingeniería existentes. Incluso es posible ubicarlo en la zona de permafrost (terreno de tierra, rocas y sedimentos amalgamado por el hielo).
Según sus creadores, la fabricación, transporte e instalación de un KUB-M “es más de dos veces más barata que la construcción de un refugio estacionario”. Además, el proceso en su conjunto no supera los tres meses.
De qué protege el KUB-M
Según sus creadores, un KUB-M proporciona protección durante 48 horas contra:
- La onda de choque aérea y la radiación luminosa de una explosión nuclear.
- La radiación penetrante y la contaminación radiactiva de la zona.
- Los efectos explosivos y de fragmentación de las armas convencionales.
- Caída de escombros de estructuras de edificios.
- Productos químicos peligrosos.
- Incendios.
El lanzamiento de la producción en serie cuenta con apoyo estatal. “Representa un paso importante para mejorar la seguridad de los ciudadanos. En el futuro, estos avances conducirán a la creación de nuevos sistemas eficaces para proteger a la población”, se lee en el comunicado del Instituto de Investigación del Ministerio de Emergencias.