¿Sabías que lo que comes puede estar afectando directamente tu
deseo sexual? A menudo, pensamos que nuestra alimentación solo
influye en la salud física, pero también juega un rol crucial en
nuestra vida íntima. Aquí te contamos sobre algunos alimentos que
podrían estar afectando tu libido sin que te des cuenta.
La
relación entre la dieta y el deseo sexual
Aunque no lo parezca, el antiguo dicho «eres lo que
comes» aplica a todos los aspectos de la vida, incluido el
deseo sexual. Lo que ingerimos puede alterar nuestros niveles
hormonales,
circulación sanguínea e incluso nuestro estado de ánimo. Una
dieta descuidada podría ser la razón detrás de esa sensación de
apatía sexual.
Alcohol
El
alcohol puede parecer un aliado para relajarte y calentar el
ambiente, pero en realidad es un enemigo silencioso de tu libido.
En pequeñas cantidades, puede desinhibir, pero el exceso de alcohol
deprime el
sistema nervioso central, dificultando no solo el deseo sino
también el rendimiento sexual. Un hígado sobrecargado por
el exceso de alcohol afecta la producción de testosterona,
lo que puede disminuir significativamente el deseo sexual.
Azúcar
refinado y alimentos procesados
Los alimentos ricos en azúcares refinados y
ultraprocesados son deliciosos, pero dañinos para tu libido. Estas
comidas disparan tu nivel de glucosa, seguidos por una caída brusca
que deja tu energía por los suelos. Además, un consumo constante de
azúcar afecta la producción de testosterona, una hormona clave para
el deseo sexual tanto en hombres como en mujeres.
Café en exceso
El café es ideal para despertarte por las mañanas, pero beberlo
en exceso puede volverse en tu contra. Altas dosis de
cafeína aumentan las hormonas del
estrés, como el cortisol, lo que puede interferir con
los niveles de testosterona. El resultado: menos energía y menor
deseo sexual.
Soja y productos
derivados
Aunque la soja tiene beneficios saludables, su consumo excesivo
podría ser un problema para tu vida sexual. La soja contiene
fitoestrógenos, compuestos que imitan el estrógeno
en el cuerpo. Esto puede desbalancear los niveles hormonales,
especialmente en hombres, disminuyendo la libido y en algunos
casos, afectando el esperma.
Carbohidratos
refinados
Pasta blanca, pan de molde y otros carbohidratos refinados
pueden ser enemigos ocultos de tu deseo sexual, porque causan
inflamación, aumentan el azúcar en sangre y contribuyen al
almacenamiento de
grasa abdominal. Estas condiciones están asociadas con
problemas hormonales y de circulación, lo que
impacta negativamente el rendimiento sexual.
Grasas
saturadas y alimentos fritos
Los alimentos ricos en grasas
saturadas, como las frituras y las comidas rápidas, afectan
gravemente la circulación. Las arterias obstruidas por el
colesterol reducen el flujo sanguíneo a todas las áreas de tu
cuerpo, incluido el área genital. Una mala circulación
significa una respuesta sexual más lenta y menos
satisfactoria.
Lácteos en
exceso
Aunque no todas las personas son sensibles a los lácteos, su
consumo excesivo puede jugar en contra de tu libido, ya que algunos
contienen trazas de hormonas que pueden desequilibrar tus niveles
naturales. En ciertos casos, también pueden causar inflamación,
afectando tu
bienestar general y contribuyendo a la fatiga y baja energía
sexual.
Consejos
para proteger tu deseo sexual
Si te preocupa cómo ciertos alimentos están impactando tu
libido, no todo está perdido. Hacer pequeños ajustes en tu dieta
puede marcar una gran diferencia:
- Incluye alimentos frescos como frutas, verduras y
grasas saludables. - Prioriza proteínas magras como el pescado y las nueces.
- Consume alimentos ricos en zinc y
magnesio, esenciales para la producción hormonal.
Además, mantener una buena
hidratación, hacer ejercicio regularmente y controlar el estrés
son aliados esenciales para mantener una vida íntima activa.
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