Una familia colombiana, que apenas comenzaba a disfrutar de su vida juntos, vio truncados sus sueños en un trágico accidente de tránsito en Colorado, Estados Unidos. El siniestro, que ocurrió mientras se dirigían a celebrar su luna de miel, dejó como saldo tres vidas perdidas y una comunidad en luto.
El pasado 15 de agosto, una devastadora colisión en la Interestatal 70, al noreste de Denver, cobró la vida de Juliana Plata Martínez, de 39 años, su esposo Rubén Rodríguez, de 33 años, y la madre de Juliana, Luz Melba Martínez, de 60 años. La pareja, que había contraído matrimonio apenas cinco días antes, se dirigía junto con sus seres queridos a las montañas para celebrar su reciente unión cuando un camión de carga volcó, esparciendo grandes tuberías de plástico por la carretera. Uno de estos tubos, que pesaba aproximadamente 500 libras, impactó directamente el vehículo en el que viajaban, resultando en la trágica muerte de los tres pasajeros.
El accidente también dejó gravemente heridos a Carlos Joaquín Plata, padre de Juliana, y a Daniel, el hijo de la pareja de tan solo un año. Ambos fueron rápidamente trasladados a centros médicos, donde recibieron tratamiento y posteriormente fueron dados de alta. La comunidad, conmocionada por la tragedia, ha iniciado una campaña para recaudar 95.000 dólares con el fin de cubrir los gastos de los funerales y el futuro del pequeño Daniel, quien ahora enfrenta un futuro sin sus padres.
Las autoridades locales han destacado la gravedad del incidente, explicando que el camión involucrado transportaba más de 100 tubos plásticos de gran tamaño, que se esparcieron por la vía al momento del volcamiento, afectando a varios vehículos que transitaban por la zona. En redes sociales, el dolor y la solidaridad se han manifestado con numerosos mensajes de apoyo y condolencias para las familias afectadas, quienes enfrentan un momento de inmenso dolor y pérdida.
Esta tragedia ha dejado una huella profunda en la comunidad colombiana en Estados Unidos y en todos aquellos que han sido testigos de la historia de esta joven familia. La esperanza de que el pequeño Daniel pueda tener un futuro mejor es el motor que impulsa a quienes han ofrecido su apoyo en estos momentos de duelo.
