Un médico autorizado y un presunto traficante de drogas del Valle de San Fernando fueron arrestados ayer en relación con la muerte del actor Matthew Perry, quien sufrió una sobredosis fatal de ketamina en octubre de 2023.
En total, cinco personas, incluidos dos médicos, han sido acusados, según documentos judiciales revelados por la fiscalía federal de los Estados Unidos.
Los cinco arrestados enfrentan una acusación formal de 18 cargos presentada por distribuir ketamina durante las últimas semanas de la vida del famoso actor que interpretó a Chandel Bing en la serie de comedia Friends de la cadena NBC.
De ser hallados culpables, se enfrentarían a sentencias que van desde los 10 a los 25 años, en una prisión federal.
Entre los imputados se encuentran Jasveen Sangha, 41 años, también conocida como “La Reina de la Ketamina”, de North Hollywood; y el doctor Salvador Plasencia, 42 años, alias “Dr. P”, de Santa Mónica.
Sangha y Plasencia están acusados de un cargo de conspiración para distribuir ketamina. Sangha también está acusada de un cargo de mantener instalaciones involucradas con drogas, un cargo de posesión con intención de distribuir metanfetamina, un cargo de posesión con intención de distribuir ketamina y cinco cargos de distribución de ketamina.
La acusación alega que la distribución de ketamina por parte de Sangha causó la muerte de Perry, en octubre de 2023, a la edad de 54 años.
¿Quién es la “Reina de la Ketamina” de Hollywood?
De acuerdo con reportes publicados, Jasveen Sangha, además de estar involucrada en la muerte de Perry, está ligada al fallecimiento, en 2019, de Cody McLaury, “Cody Bear” o “Kiki”un hombre de 33 años, miembro de la comunidad LGBTQ originario de Alaska, que vivía en Los Ángeles, según declaró el fiscal federal Martin Estrada.
La mujer presuntamente es parte de la extensa red criminal que suplía al actor Perry de ketamina.
De acuerdo con el Centro Nacional de Inteligencia sobre Drogas, la ketamina es un anestésico del que se abusa por sus propiedades alucinógenas. Su principal uso legítimo es como anestésico veterinario; sin embargo, se ha aprobado su empleo tanto en animales como en seres humanos.
Venta clandestina de droga “solo a celebridades”
A Matthew Perry, su asistente Kenneth Iwamasa le inyectó la ketamina, como lo había hecho varias veces anteriormente, pero sin contar con una licencia médica para hacerlo.
La ketamina utilizada en la muerte de Perry se hizo presuntamente con instrucciones y jeringas proporcionadas por el doctor Salvador Plasencia y la ketamina en sí fue vendida por Eric Fleming y Jasveen Sangha.
En documentos oficiales de la acusación entregados a La Opinión, se describe que, entre los mensajes de texto compartidos por los acusados, Jasveen Shanga era conocida por la comunidad de North Hollywood por “tratar únicamente con celebridades” en su negocio clandestino de distribución de drogas.
Ella está acusada de utilizar su residencia en North Hollywood, conocida como ‘Sangha Stash House’ (casa de escondite de Shanga), para almacenar, empaquetar y distribuir narcóticos, incluidas ketamina y metanfetamina.
La acusación afirma que la mujer, -que tiene doble nacionalidad: británica y estadounidense-, “sabía que el uso inadecuado y sin supervisión de ketamina puede ser mortal”.
Señala, además, que después de que un miembro de la familia de Cody McLaury le envió a Sangha un mensaje de texto diciendo que una sobredosis de ketamina había matado “Cody Bear”, en 2019, Sangha realizó una búsqueda en Google de “¿Se puede incluir la ketamina como causa de muerte [?]”?
Los doctores Salvador Plasencia y Mark Chávez, 42 años, así como Kenneth Iwamasa, de 59 años, y el vendedor de drogas, Eric Flemming, de 54 años, también son parte de la acusación federal.
Plasencia está acusado de siete cargos de distribución de ketamina y dos cargos de alteración y falsificación de documentos o registros relacionados con la investigación federal.
Jasveen Sangha y Plasencia fueron procesados por la tarde del jueves en el Tribunal de Distrito de los Estados Unidos en el centro de Los Ángeles.
Según la acusación, a finales de septiembre de 2023, Plasencia se enteró de que Perry, cuyo historial de adicción a las drogas estaba bien documentado, estaba interesado en obtener ketamina.
Después, Plasencia se puso en contacto con el doctor Mark Chávez, quien anteriormente operaba una clínica de ketamina, para obtener el potente analgésico y vendérselo a Perry.
En mensajes de texto dirigidos a Chávez, Plasencia discutió cuánto cobrarle a Perry por la ketamina, diciendo: “Me pregunto cuánto pagará este imbécil” y “Averigüemos [sic]”.
También, el doctor Plasencia vendió ketamina a Kenneth Iwamasa, a pesar de que le informaron al menos una semana antes que la adicción a la ketamina de Perry se estaba saliendo de control.
Y, cuando se informó sobre la muerte de Perry en las noticias, Jasveen Sangha le envió un mensaje de texto al vendedor de drogas Eric Fleming, diciéndole: “Elimina todos nuestros mensajes”.
“Imagino que ocultarían su actividad [distribución ilícita de drogas], a través del velo de respetabilidad que obtienen al ser médicos autorizados”, dijo a La Opinión Ciaran McEvoy, portavoz de la fiscalía de los Estados Unidos en Los Ángeles.
“Creo que, si usted sabe que le falta su código moral, sería bastante fácil usar su licencia médica como si fuera mejor ser un traficante de drogas común, pero, por supuesto hay un riesgo en hacer eso, ser arrestado y pasar un largo tiempo en prisión, especialmente si alguien muere”, añadió.
Perry falleció en su casa de Los Ángeles y su autopsia reveló que fue por los efectos de “los altos niveles de ketamina” hallados en sus muestras de sangre post mortem, además de factores como el “ahogamiento, enfermedad de las arterias coronarias y los efectos de la buprenorfina”.
“Codicia de los traficantes”
“Estos acusados se preocupaban más por sacar provecho del señor Perry que por su bienestar”, dijo el fiscal federal Martín Estrada. “Por codicia, los traficantes de drogas que venden sustancias peligrosas están jugando con la vida de otras personas”.
Estrada añadió que, en este caso, junto con muchos otros procesamientos de traficantes de drogas que causan muertes, envía un mensaje claro “de que responsabilizaremos a los traficantes de drogas por las muertes que causan”.
El jefe interino del Departamento de Policía de Los Ángeles, Dominic Choi, declaró que llevar a los acusados ante la justicia por su papel en la prematura muerte de Matthew Perry requirió amplia coordinación.
“Agradezco a los detectives de LAPD y a nuestros socios federales por su paciencia y dedicación en el caso”, dijo Choi.
“A diario los oficiales de LAPD son testigos de primera mano del daño que estos narcóticos pueden causar, por lo que me complace que nuestros esfuerzos colectivos hayan conducido al arresto de estas personas”, agregó.
“Se puede hacer y vender en la calle”
Paula Torres, directora ejecutiva de Compatior, un centro de tratamiento ambulatorio que brinda servicios individualizados para trastornos por uso de sustancias (TUS) a jóvenes y adultos en la ciudad de South Gate dijo que la ketamina que mató al actor “es como el fentanilo que se puede procesar en laboratorios clandestinos”.
“Es como cualquier otra droga que se puede hacer y vender en la calle”, dijo a La Opinión.
Sin conocer a fondo el caso de la muerte del actor Perry, y la presunta acción criminal de los médicos que le suministraron el anestésico, el doctor Ilan Shapiro, director de Servicios Médicos de Altamed, declaró que, “en general, lo más importante del juramento que hacemos todos nosotros como médicos es para el bien del paciente”.
“De la misma manera que hay servidores públicos que toman caminos que no deben de ser, es importante reconocer eso y llamar la atención para que esto no suceda”, dijo.
Los otros tres acusados:
- Eric Fleming, de 54 años, de Hawthorne. Se declaró culpable el 8 de agosto de un cargo de conspiración para distribuir ketamina y un cargo de distribución de ketamina con resultado de muerte. Fleming admitió en documentos judiciales que distribuyó la ketamina que mató a Perry. Admitió además haber obtenido la ketamina de su fuente, Jasveen Sangha, y haber distribuido 50 viales de ketamina al asistente personal de Perry, Kenneth Iwamasa, la mitad de ellos cuatro días antes de la muerte del actor.
- Kenneth Iwamasa, 59 años, de Toluca Lake, quien conspiró con Sangha, Fleming y el doctor Plasencia para obtener ilegalmente ketamina y distribuirla a Matthew Perry. Iwamasa, quien se declaró culpable el 7 de agosto de un cargo de conspiración para distribuir ketamina causando la muerte, admitió haber inyectado ketamina repetidamente a Perry sin capacitación médica, incluida la realización de 24 inyecciones a Perry, entre el 24 y 28 octubre de 2023, el día en que murió el actor.
- Doctor Mark Chávez, 54 años, de San Diego, un médico que aceptó declararse culpable de un cargo de conspiración para distribuir ketamina. Chávez admitió en su acuerdo de culpabilidad haber vendido ketamina a Plasencia, incluida ketamina que había desviado de su antigua clínica. Chávez también obtuvo ketamina adicional para transferirla a Plasencia haciendo declaraciones falsas a un distribuidor mayorista de ketamina y presentando una receta fraudulenta a nombre de un expaciente sin el conocimiento o consentimiento de ese paciente.