Por Esther Santos.- En los últimos tiempos, en Europa, la ultraderecha en Europa reviste de un importante avance. Principalmente, debido a escenarios como la guerra entre Rusia y Ucrania, la migración ilegal, el vandalismo, la inseguridad y la economía. Escenarios que propician en el “viejo continente” un declive del socialismo de centroizquierda.
Los recientes resultados electorales de la ultraderecha en Europa, especialmente en España, Francia, Italia, Alemania y Suecia, parecen no facilitar el trabajo de Ursula Von Der Leyen, presidenta de la Comisión Europea, y sus decisiones de mantener la agenda 2030 en la Unión Europea, los financiamientos a Ucrania y la aprobación de migración ilegal.
Avance de la ultraderecha en Europa
El giro que actualmente toma Europa es digno de un análisis geopolítico. En primer lugar, de las situaciones que viven los nacionales europeos en temas migratorios. También en lo político, social y económico, se observa un declive que hace que los ciudadanos europeos opten por darle un voto de confianza a la extrema derecha para ver si pueden encaminarlos hacia la paz que antes podían tener los europeos en sus territorios.
La ultraderecha en España
En los recientes comicios del Parlamento Europeo, en el escenario español, el Partido Popular de centro derecha obtuvo 191 escaños. Resultados que no fueron de buen gusto para la presidente de la Comisión Europea que se relige a su segundo mandato y que pertenece al Partido Socialista.
Antes de que VOX entrara en la red partidaria de España, no existía coalición que haga frente a los gobiernos de centro-izquierda. Sin embargo, los que había solo se disputaban el liderazgo de la derecha mientras el socialismo avanzaba.
Uno de los ejes fundamentales que ayudó a los partidos de derecha en España a ser más visibilizados son las redes sociales. Allí lograron publicitar sus planes de gobierno y captar seguidores, tanto de nacionales como migrantes legalizados. Principalmente con consignas sobre el nacionalismo y contra las ocupaciones de casas ilegales, la migración, la delincuencia e inseguridad. Temas que permiten a los partidos de derecha captar adeptos y escalar hacia un éxito político.
Actualmente, el socialismo español se ve obligado a generar consensos con la derecha de VOX y el Partido Popular (PP) para que Pedro Sánchez pueda gobernar. No obstante, la derecha se abre paso luego de su victoria en las elecciones del Parlamento Europeo. El escenario le deja claro al actual presidente del Gobierno español que las cosas no serán fáciles.
La ultraderecha en Italia
En el 2022, la ultraderecha en Italia encabezada por Giorgia Meloni ganó las elecciones. Desde la Segunda Guerra Mundial la ultraderecha no gobernaba en Italia. Principalmente, por el miedo de los italianos de volver escenarios que recuerden aquella historia feroz encarnada en la figura de Benito Mussolini.
Meloni en más de una ocasión demostró el alto aprecio y admiración que le tenía a Mussolini. Aunque la centroizquierda de Italia insistió en la idea del carácter “dictatorial” de la actual presidenta, esta se defendió asegurando que gobernaría “a favor de todos los italianos”.
Aunque Meloni después de 2 años en el gobierno expresó que no ha podido obtener los resultados esperados en Italia en el tema migratorio, sigue trabajando de mano de la Unión Europea para ofrecer resultados al pueblo italiano. La primera ministra también ha estrechado lazos de cooperación con el presidente de los Estados Unidos, Joe Biden; algo no esperado.
Pero, según analistas políticos, Meloni ha implementado otra manera de gobernar, la cual logra buena acogida por los italianos y mantiene los indicios de aprobación.
La ultraderecha en Alemania
Alemania también ha visto la victoria de la derecha extrema en las elecciones del parlamento por la Alternative fur Deutschland (AfD); por encima de la coalición del canciller Olaf Scholz.
El Partido Socialista de Alemania y el Partido Verde culpan a la derecha de ser agresiva e imponente debido a sus ataques. Mientras tanto, la AfD niega estar detrás de estos presuntos ataques.
Aún así, la extrema derecha alemana sigue sumando más simpatizantes debido a las políticas nacionalistas que promete y sus arremetidas contra el socialismo.
Ultraderecha gana elecciones en Francia
Francia no ha sido la excepción. No solo la ultraderecha ganó escaños al Parlamento Europeo, sino que también eligió al partido de Marine Le Pen para asumir como Primera Ministra de Francia, en una primera vuelta. Le Pen, mundialmente reconocida líder de la derecha extrema europea, debilitó las intenciones del actual presidente, Emmanuel Macron, quien quedó en un tercer lugar por debajo del socialismo izquierdista.
Viendo la mala racha inesperada que le acompañó en las elecciones del Parlamento Europeo, Macron decidió el 10 de junio convocar elecciones anticipadas, que resultaron en una alternativa para la extrema derecha de Marine Le Pen, obteniendo un 33% en esas votaciones.
Aun así, Macron pidió a los demás partidos políticos hacer una unión para hacer frente a la ultraderecha en las elecciones de la segunda vuelta y así poder contrarrestar el porcentaje que obtuvo en los comicios.
¿Voto castigo?
Estos escenarios de avance de la ultraderecha en Europa también se reflejan en otros territorios de la unión, como en Países Bajos, que se cambió al centro derechismo gobernado por Mark Rutte; o en Suecia, que eligió al derechista Ulf Kristersson como primer ministro.
Así, los gobernantes socialdemócratas de toda Europa vienen perdiendo poder en los últimos tiempos. Para muchos analistas, la sociedad europea responde con “votos de castigo” al centroizquierdismo liberal, optando por una derecha que, confían, ponga atención a los problemas que afectan a los europeos y, especialmente, detenga o regule la migración masiva ilegal en toda Europa y la violencia e inseguridad que se propaga en los sectores más vulnerables.