Cancún, el paraíso turístico al que la violencia ha convertido en un infierno, fue el escenario de un intento de ejecución a manos de dos sicarios cuya poca destreza los llevó a caer en manos de las autoridades tras fallar el crimen.
De acuerdo con el sitio de noticias Sipse, policías municipales realizaban labores de patrullaje cuando giraron en una avenida importante, en ese momento escucharon varios disparos, por lo que se dirigieron al sitio de donde provenían, cerca de un gimnasio.
Justo en ese instante vieron que una motocicleta con dos tripulantes cruzó el camellón a toda velocidad, alcanzaron a ver que el copiloto llevaba un arma de fuego corta en la cintura, por lo que dedujeron que eran quienes habían disparado segundos antes.
Mientras los policías comenzaron una persecución de los sospechosos, a una gasera llegó un automovilista que poco antes había sido atacado a balazos, tras resguardarse pidió ayuda a los empleados que a su vez llamaron al 911.
Durante la persecusión, los sospechosos no tomaron en cuenta que las recientes lluvias dejaron el pavimento resbaloso, por lo que el exceso de velocidad y lo mojado del pavimento causaron que perdieran el control de la unidad y derraparan.
Una vez en el piso los agentes aprovecharon para detenerlos, durante la inspección se les decomisó un arma de fuego calibre 9mm con un cargador y cuatro cartuchos, una motocicleta sin placas y un teléfono celular.
Ambos detenidos, identificados únicamente como Rivaldo “N” y Fernando “N” podrían ser ciudadanos colombianos, según reportes extraoficiales difundidos por el diario local Cambio22.
Además, están siendo investigados por otros casos y delitos ocurridos días antes, relacionados con otros ataques a balazos.
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