Solíamos pensar que Justin Jefferson era a prueba de mariscales de campo. Después de todo, registró números enormes con Sam Darnold, ayudó a convertir a Kirk Cousins en una estrella legítima tras solo una temporada aceptable con Washington e incluso le había ido bastante bien con el suplente Nick Mullens durante un período corto. Ningún QB podía mantener a Jefferson abajo, ciertamente no bajo la tutoría del entrenador Kevin O’Connell. Resulta que quizás Jefferson solo era resistente a los QB, no a prueba de ellos, porque esta temporada no ha salido como se esperaba. No se ha parecido a ninguna temporada anterior. El problema no parece ser Jefferson, sino específicamente los mariscales de campo. Ya sea J.J. McCarthy, Carson Wentz o —vaya— Max Brosmer, Jefferson está sufriendo su peor temporada como profesional, por mucho. **REDACCIÓN FV MEDIOS**
