Santo Domingo.- Entre el dolor y la indignación, Ángela Isabel Delgado Piña defendió la memoria de su hijo Elvin Sadel Urbáez Delgado, de 19 años, quien fue asesinado a tiros la noche del 26 de diciembre mientras compartía con un grupo de amigos en un espacio cercano a su residencia, en el sector La Caleta.

“Era un muchacho amable, amistoso, desordenado como cualquier joven de su edad y muy amoroso”, expresó la madre al describir a su hijo, a quien define como un joven dedicado al deporte y alejado de actividades delictivas.
“Mi hijo era deportista, no un pandillero”, sostuvo Angela entre lágrimas.
Elvin Sadel tenía como principal pasatiempo el baloncesto, disciplina en la que se destacó desde temprana edad. Según su madre y vecinos, era considerado “uno de los mejores del barrio” y participó en su último torneo a inicios del mes de diciembre. Incluso, entrenadores de distintos equipos acudían a verlo jugar, y fue reconocido en varias ocasiones como Jugador Más Valioso (MVP) en torneos locales.
Ángela Delgado relató que los presuntos responsables del hecho crecieron junto a su hijo y solían visitar su casa. “Se criaron juntos, venían aquí a comer, pero hace un tiempo se alejaron por fariseos”, indicó, sin ofrecer mayores detalles.
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La madre también rechazó las declaraciones del vocero de la Policía Nacional, Diego Pesqueira, quien vinculó el crimen a “viejas rencillas personales entre grupos de la zona, incluyendo uno denominado ‘Los Macaos’”. Delgado calificó estas afirmaciones como infundadas y aseguró que las autoridades no han actuado con la debida diligencia.
“Ellos no quieren hacer su trabajo. No tienen a nadie detenido”, denunció.
Elvin Sadel dejó en la orfandad a su hija Britney, de apenas un año de edad, quien aún espera que su padre regrese a casa.
Asimismo, Ángela Delgado pidió justicia no solo por su hijo fallecido, sino también por Erwin Sadel, quien permanece ingresado en un centro de salud a causa del mismo hecho violento.
“Quiero que se esclarezcan los hechos y que el nombre de mis hijos no sea manchado. Mi hijo no es un bandolero y quiero justicia como madre”, concluyó.
Las autoridades informaron que el caso continúa bajo investigación.



