Un episodio de tensión interrumpió el ambiente navideño en un Walmart de Homewood, Alabama, cuando una clienta hispana fue increpada por hablar español dentro del establecimiento. La situación ocurrió en una zona concurrida del supermercado durante las compras de fin de año, generando incomodidad entre los clientes que presenciaron el intercambio verbal, registrado en video. La mujer afectada, visiblemente alterada, comenzó a grabar con su teléfono tras sentirse vulnerable, mientras la otra clienta le exigía dejar de comunicarse en español. Entre lágrimas, la víctima solicitó ayuda y expresó sentirse en peligro. “Señor, disculpe, llamen a la autoridad, por favor. Estoy temblando”, se escucha decir en el audiovisual. En el mismo material se observa que ningún empleado del establecimiento intervino durante el intercambio, pese a que la tensión aumentaba con expresiones ofensivas reiteradas. La mujer que increpaba reaccionó de forma hostil al escuchar el idioma español, sin mediar conversación previa, elevando el tono y lanzando expresiones intimidantes. “No juegues conmigo, maldito”, se escucha decir, mientras la afectada intentaba explicar que solo conversaba con su acompañante dentro del local comercial. Durante el incidente, la víctima expresó sentirse desprotegida. “Aquí es en la Walmart de Homewood. Nadie llama a la autoridad”, afirmó mientras continuaba grabando. Aunque no se produjeron contactos físicos, el contenido del video refleja una confrontación verbal con expresiones de rechazo cultural, lo que ha generado preocupación en comunidades latinas. La referencia a contactar a ICE, el organismo migratorio federal, fue percibida como una advertencia intimidante, utilizada para generar temor por el uso del idioma español. Organizaciones defensoras de derechos reaccionaron rápidamente, señalando que este tipo de episodios afectan emocionalmente a familias migrantes en espacios públicos cotidianos. Una vocera del Centro de Justicia del Sur calificó el hecho como intolerancia abierta, señalando que a menudo se presenta erróneamente como preocupación cívica. La identidad de la mujer afectada no ha sido revelada. En el video, pidió no ser grabada y aclaró que no cometía ninguna falta. La ausencia de intervención por parte del personal del establecimiento fue uno de los aspectos más criticados en redes sociales, donde el video acumula miles de reacciones. Hasta ahora, Walmart no ha emitido un comunicado oficial, aunque empleados indicaron de forma extraoficial que se revisan los protocolos internos de atención. Agrupaciones latinas impulsan campañas para visibilizar estos episodios y promover políticas claras contra el acoso verbal en establecimientos comerciales. **REDACCIÓN FV MEDIOS**
