El Departamento de Vehículos Motorizados (DMV) de California enfrenta una demanda colectiva presentada en nombre de casi 20,000 camioneros inmigrantes, quienes buscan detener la revocación masiva de sus licencias de conducir comerciales (CDL).
La demanda, presentada este martes por el Asian Law Caucus, el Sikh Coalition y el bufete Weil, Gotshal & Manges LLP, advierte que las cancelaciones programadas para enero de 2026 provocarían ‘paros laborales masivos’ y graves afectaciones a la economía.

Según la denuncia, el DMV notificó el 6 de noviembre a 17,299 conductores y dueños de negocios inmigrantes que sus CDL no domiciliadas serían canceladas el 5 de enero de 2026 debido a un error en las fechas de vencimiento. En diciembre, se envió una notificación similar a otros 2,700 conductores, programando la cancelación para mediados de febrero.
‘Esta demanda colectiva se presenta en nombre del Jakara Movement y cinco conductores comerciales a quienes se les han privado de sus derechos y medios de vida’, declararon las organizaciones demandantes. Agregaron que, pese a promesas públicas de reemitir licencias a partir del 17 de diciembre, el estado no ha tomado medidas concretas ni establecido un proceso de corrección.
El conflicto legal surge de una discrepancia regulatoria: el DMV debe establecer la fecha de vencimiento de una CDL para inmigrantes coincidiendo con el fin de su autorización de trabajo o presencia legal. La demanda alega que el departamento incumplió este requisito y ahora pretende cancelar las licencias sin ofrecer oportunidad de corrección o apelación.
La medida afectaría a conductores que ‘desempeñan un papel indispensable en nuestras economías locales y nacionales, transportando alimentos, llevando niños a la escuela y entregando bienes manufacturados’, señala el documento legal. ‘La pérdida repentina de su capacidad para trabajar amenaza no solo sus medios de vida, sino también la estabilidad de nuestras cadenas de suministro’.
Entre los casos citados, un demandante identificado como John Doe 4 recibió la notificación de cancelación aunque su CDL vence el mismo día que su autorización de trabajo. Otro conductor, miembro del Jakara Movement, declaró haber sido ‘presionado para entregar su CDL’ al acudir personalmente a una oficina del DMV.
La demanda solicita una orden judicial que obligue al DMV a garantizar que los afectados puedan obtener licencias corregidas ‘sin interrupción de sus privilegios de conducción’.
El conflicto se enmarca en un escenario político más amplio. En noviembre, el Departamento de Transporte federal anunció que California planeaba revocar 17,000 CDL, acusando al estado de emitirlas ilegalmente. La oficina del gobernador Gavin Newsom rechazó dicha afirmación.
Esta acción ocurre tras una serie de choques fatales que involucraron a conductores con CDL no domiciliadas, lo que llevó a la administración Trump a impulsar una revisión del proceso de emisión de licencias comerciales.
Hasta el momento, el DMV de California y la oficina del gobernador Newsom no han respondido a solicitudes de comentario.
**Redacción FV Medios**
**REDACCIÓN FV MEDIOS**



