En su primera temporada baja al frente de los Mets, David Stearns priorizó la mejora en la ‘prevención de carreras’, fichando a jugadores como Harrison Bader, Tyrone Taylor y varios lanzadores abridores para impulsar un resurgir.
En la segunda temporada baja, sus filosofías de construcción del equipo quedaron relegadas por la chequera de Steve Cohen, quien otorgó el contrato más cuantioso en la historia del béisbol a Juan Soto.
En la tercera temporada baja, Stearns generó escepticismo al insistir, con mayor énfasis, en la ‘prevención de carreras’. Esto antecedió al desmantelamiento del núcleo del equipo, que no logró prevenir o producir suficientes carreras para evitar el lento declive de la temporada 2025.
En muchos aspectos, esta tercera fase marcará el inicio de la verdadera era Stearns en Queens. Durante el último mes, el presidente de operaciones de béisbol de los Mets ha desmantelado gran parte del legado anterior. Lo que surja de estas cenizas será un equipo forjado a su imagen y semejanza, para bien o para mal.
**REDACCIÓN FV MEDIOS**