Mike Tyson y el exluchador profesional Ric Flair han presentado una demanda civil contra sus antiguos socios en la empresa de licencias de cannabis Carma HoldCo Inc. Los legendarios deportistas acusan a los exejecutivos Chad Bronstein, Adam Wilks y Nicole Cosby de una conspiración bajo el estatuto RICO que incluiría fraude electrónico, malversación, lavado de dinero, extorsión y fraude de valores.
Un documento judicial de 76 páginas, presentado en Illinois por el bufete neoyorquino Willkie Farr & Gallagher LLP, detalla las alegaciones. Según el expediente, obtenido por The Post, “Bronstein y Wilks trataron a CARMA como su propia alcancía personal, utilizando más de un millón de dólares para pagar viajes personales no autorizados en jets privados, costos asociados con el yate personal de Bronstein, renovaciones en su residencia, un pago de hipoteca para la residencia de Wilks y gastos de entretenimiento lujosos”.

La demanda, que busca 50 millones de dólares en daños y perjuicios más honorarios legales, también alega que Bronstein compró un reloj para el entrenador de los Rams, Sean McVay, con fondos de la empresa “sin que McVay lo supiera”. Los abogados de Tyson y Flair han solicitado un juicio con jurado.
Por su parte, los acusados han negado categóricamente las imputaciones. “Estas afirmaciones son tan creíbles como las personas de las que provienen; en resumen, las acusaciones carecen de sustancia”, declaró Terry Campbell, abogado de Wilks, a Front Office Sports. Jonathan Cyrluk, representante de Bronstein y Cosby, añadió: “La demanda es ficción disfrazada de pleito”.
Este caso se produce en el contexto de litigios previos de Carma HoldCo contra Bronstein, a quien acusó de robar la idea de la marca ‘Real American Beer’ junto a la difunta estrella Hulk Hogan. La empresa sostenía que los ejecutivos violaron sus acuerdos de empleo al explotar estrategias de marketing para la nueva cerveza.
Para Tyson, esta no es su primera experiencia con disputas legales de gran envergadura. El exboxeador afirmó previamente que el promotor Don King lo estafó por 14 millones de dólares y había “desviado” bolsas de peleas desde 1988. **REDACCIÓN FV MEDIOS**


