
La Autoridad Marítima Nacional (AMN) de Portugal informó este domingo de que han encontrado dos cuerpos en playas del norte del país y que “todo indica” que son de dos de los tres pescadores indonesios que desaparecieron el 14 de diciembre tras el naufragio de su embarcación en la desembocadura del Miño.

La entidad explicó en un primer comunicado que recibieron una alerta de que había un cadáver en la playa de Moledo, cerca de la desembocadura del río Miño, a las 08.36 horas a través de la Guardia Nacional Republicana (GNR) y que, tras el aviso, enviaron a la zona a elementos de la Policía Marítima, de los Bomberos voluntarios y de la Policía Judicial (PJ). La AMN precisó que emitieron el certificado de defunción en el lugar, en la zona de Caminha, próxima a la frontera con España.
En un segundo comunicado, la autoridad amplió que esta jornada encontraron otro cuerpo en la playa de la Ínsua, a unos nueve kilómetros hacia el sur. En este caso, recibieron el aviso a las 11.39 horas a través del Centro de Coordinación de Búsqueda y Salvamento Marítimo de Lisboa. También emitieron el certificado de defunción en el lugar, a donde se habían dirigido agentes de los bomberos, de los servicios médicos de emergencias, de la GNR y de la PJ. Se ha activado el gabinete de Psicología de la Policía Marítima, que está prestando apoyo a las víctimas y a los familiares.
El naufragio tuvo lugar el pasado domingo en una zona rocosa de la isla de Ínsua, en el municipio de Caminha. Durante las labores de salvamento de ese día, fueron rescatados dos tripulantes del barco naufragado, el patrón y un pescador de nacionalidad indonesia, que fueron llevados en estado consciente a un hospital, según la Autoridad Marítima Nacional de Portugal, aunque seguían desaparecidos otros tres tripulantes de nacionalidad indonesia.
A lo largo de esta semana se habían sumado a las búsquedas las autoridades españolas, debido a la proximidad de la zona del accidente con el país vecino. Por otro lado, la Armada portuguesa rescató el martes a tres pescadores mientras que otros cuatro permanecen desaparecidos tras el naufragio de un barco pesquero frente a las costas de Aveiro, en el norte del país.


