La Casa Blanca negó que los efusivos comentarios del expresidente Donald Trump sobre la representante Elise Stefanik durante un evento en el Despacho Oval constituyan un respaldo oficial en las primarias republicanas por la gobernación de Nueva York. Stefanik obtuvo una posición privilegiada detrás de Trump en una sesión fotográfica del viernes, durante un acto que celebraba al equipo olímpico de hockey de EE.UU. y su ‘Milagro sobre el Hielo’ en Lake Placid, localidad que forma parte de su distrito congresional.
La congresista se posicionó justo detrás del expresidente, destacándose entre un grupo de exatletas universitarios con sombreros de vaquero que protagonizaron la sorpresa contra el equipo olímpico soviético en 1980. Trump habló favorablemente de Stefanik y mencionó su contienda contra el Ejecutivo del Condado de Nassau, Bruce Blakeman, inclinando ligeramente la balanza en contra de este último, quien lanzó su campaña apenas cuatro días antes.

‘Todos conocen a Elise, le está yendo fenomenalmente bien y se postula para un pequeño puesto llamado gobernadora de Nueva York. Tiene una oportunidad tremenda, es todo lo que puedo ver’, dijo Trump sobre su intento de derrotar a la gobernadora demócrata Kathy Hochul. ‘Tiene un poco de competencia con un muy buen republicano, pero ella es una gran republicana’, añadió.
Un alto funcionario de la Casa Blanca afirmó posteriormente a The Post que ‘él piensa muy bien de ella’, al tiempo que negaba que esto implicara un respaldo oficial. ‘Si no pensara bien de ella, no la habría nominado para ser embajadora ante la ONU. Ella fue muy útil durante la campaña’, señaló.
El miércoles previo, Trump había evadido la pregunta de The Post sobre si le había dicho a Blakeman que no se postulara. ‘Él es un amigo. Ella es una amiga. Son dos grandes personas competiéndose. En cierto modo, odio verlos competir. Espero que no se dañen el uno al otro’, declaró. Sobre un posible respaldo futuro, fue ambiguo: ‘Probablemente tendré que hacer lo que quiera hacer’.
La naturaleza del papel de Trump se ha vuelto un tema delicado. The New York Times publicó una corrección a una historia del 10 de diciembre en la que admitió haber informado ‘de manera inexacta’ sobre una llamada de Trump a Blakeman. El medio aclaró que el expresidente no llegó a ‘decir explícitamente’ a Blakeman que no se postulara, pero sí intentó ‘disuadirlo’.
‘Sé que el presidente Trump aprecia la competencia y estoy seguro de que siente que nadie debe ser coronado, que hay un proceso. Y probablemente esté averiguando cuál es el mejor candidato, que es lo inteligente que hacer’, dijo Blakeman a The Post antes de lanzar su candidatura. Estas declaraciones provocaron una reprimenda de la Casa Blanca.
‘Nadie debería hablar por el presidente Trump, a menos que esté autorizado por el presidente Trump’, afirmó la secretaria de prensa Karoline Leavitt. En respuesta, el director de comunicaciones de Blakeman, Chris Boyle, declaró: ‘El Ejecutivo del Condado Blakeman dejó claro que no estaba hablando por el presidente, pero basándose en su historia como atleta y ex propietario de un equipo profesional, es ampliamente conocido que él es el competidor definitivo y disfruta de la competencia’.
Horas después del evento con Stefanik, Blakeman emitió un comunicado en el que afirmó haber ‘abrazado al presidente’ y ‘unido al presidente Donald J. Trump para exponer las fallidas políticas de estado santuario de Kathy Hochul’. El texto citaba datos sobre la población carcelaria e inmigración ilegal en el estado, y destacaba: ‘Bruce Blakeman está muy agradecido de que el presidente Trump se haya referido a él como ‘grandioso’ y ‘fantástico”.
**REDACCIÓN FV MEDIOS**


