
Donald Trump mantiene su posición ofensiva contra Europa. A la estrategia de seguridad de EEUU en la que avisaba de que el continente se está deshaciendo y en la que llamaba a votar a fuerzas de derecha radical se ha sumado ahora un mensaje: Europa es “débil” porque sus líderes son “muy políticamente correctos” y se está “destruyendo” a sí mismo en lo que el presidente de Estados Unidos considera una mala gestión de la migración. Esto se une, además, a las críticas tremendas de su Administración por la reciente multa de 120 millones de euros de Bruselas a X. Tras ella, Elon Musk llamó a la “abolición” de la UE.

Trump sigue sin morderse la lengua y así lo ha expresado en una entrevista en Politico. “Europa no sabe qué hacer. No saben tampoco qué hacer a nivel comercial. La situación es un tanto peligrosa, pero ser políticamente correctos es lo que los hace débiles”, aseguró, y se desmarcó de cualquier responsabilidad: “Yo quiero una Europa fuerte”. Entiende Trump que Rusia la quiere “débil” pero él, a tenor de sus palabras, no tiene nada que ver con las dinámicas del Kremlin.
El foco del inquilino de la Casa Blanca está, sobre todo, en la inmigración.”Europa está siendo destruida. Tenéis que entenderlo: quiero una Europa fuerte. Cuando dejan entrar a millones de personas, muchas de estas personas acaban cometiendo crímenes atroces”, expuso, y puso como ejemplo a Suecia. “Ahora tiene mucha criminalidad”, aseguró. Alemania también le vale, dijo, como paradigma de eso, y culpó directamente a Angela Merkel. “Cometió dos grandes errores: inmigración y energía”, esgrimió en referencia también a la dependencia de Rusia. Así, Trump cree que el viejo continente tiene que aprender de él en materia migratoria. “Su política migratoria es un desastre, pero he sido capaz de detenerlo. Ahora no tenemos a la gente viniendo a nuestro país. Cero personas durante siete meses. Quiero decir, ¿quién iba a creerlo? Hemos pasado de millones de personas a ninguna”, sentenció.
“La OTAN me llama papaíto”
Su posición o no de aliado de la UE no le preocupa lo más mínimo. “Lo que quiero es liderar Estados Unidos, no Europea, y me veo involucrado mucho allí. La OTAN me llama papaíto. Quiero decir, tengo mucho que decir. He aumentado el gasto en defensa del 2 al 5% del PIB”, resumió, y ahí puso como ejemplo a Turquía. Y dice no tener “enemigos” en Europa. “En realidad me gustan todos, soy amistoso con todos ellos. Había un par de personas a lo largo de los años que no me gustaban, pero ahora me gusta el equipo. Los conozco muy bien, algunos son amigos. Sé cuando un líder es malo, bueno, inteligente o estúpido, pero no están haciendo un buen trabajo. Europa no está haciendo un buen trabajo”.
“A Europa llega gente de todas partes, no solo de Oriente Próximo. Llegan en números tremendos y muchos llegan desde prisiones de República Democrática del Congo y otros muchos países. Ahora no quieren enviarlos de vuelta adonde han venido“, añadió un Trump que culpó a los líderes europeos de estar “destruyendo sus países”.
Tuvo tiempo de abordar, por otro lado, la situación con Ucrania, y avisó de que Rusia tiene “ventaja” en la guerra y por tanto una posición más fuerte que Kiev en la mesa de negociaciones. “Es un país mucho más grande”, recordó el presidente de EEUU, y lanzó un mensaje para Volodimir Zelenski. “Habían perdido territorio mucho antes de que yo llegara. Perdieron una franja entera de costa, una gran franja de costa. Ahora es una franja más grande, más ancha. Han perdido mucho terreno, y era buen terreno”, sostuvo.
Con las conversaciones algo atascadas estos días, Trump alertó además de que el escenario no va a cambiar, porque Moscú, dice, siempre ha estado en ventaja. “Siempre la han tenido. Son mucho más grandes. Son mucho más fuertes, en ese sentido. Doy un gran crédito al pueblo y el Ejército de Ucrania por su valentía y por la lucha y todo eso, pero en algún punto el tamaño vence, generalmente. Es un tamaño masivo, cuando se mira a las cifras. Son una locura”, concluyó.
Al mismo tiempo, considera que Europa “no está gestionando bien el conflicto” y reiteró que esta “no es” su guerra y puso el foco en las gestiones, de nuevo, de los líderes europeos. “Empezó y pudo haber derivado en la Tercera Guerra Mundial, pero creo que no es lo que va a pasar ahora. Si yo no fuera presidente, hubiera estallado la Tercera Guerra Mundial. Creo que habría un problema mucho mayor que el que hay ahora, pero el de ahora ya es grande. Es un gran problema para Europa y no lo están gestionando bien”, desarrolló durante la entrevista.
Estas palabras, todas, de Trump se dan en otro momento de máxima tensión con Europa. “Necesitamos algo más que nuevas energías. Debemos centrarnos en construir una Europa que comprenda que las relaciones entre aliados y las alianzas posteriores a la Segunda Guerra Mundial han cambiado”, avisó por ejemplo este lunes el presidente del Consejo Europeo, Antonio Costa, que cree que EEUU ya no es aliado de la UE porque “no cree en el multilateralismo ni en el orden basado en normas”. Asimismo, la Alta Representante de la UE, Kaja Kallas, ha avisado de que “es ridículo” que Washington planteé que en Europa no hay libertades, como planteó Musk, apoyado en redes sociales por otros cargos de la Administración Trump y del Kremlin.
También tuvo tiempo Kallas para reaccionar a la estrategia de seguridad de EEUU, en la que pide confrontar con Europa y llama indirectamente al voto a formaciones de extrema derecha. La Alta Representante reclamó a los eurodiputados “mantener la calma” y que la UE siga su propio rumbo sin entrar en una pelea con Washington. “Creo que debemos estar seguros de nosotros mismos. Sabemos que esas cosas no son verdad. Los problemas que aparecen en la estrategia de seguridad nacional no son peores en Europa que en Estados Unidos”, sostuvo en una comparecencia ante la comisión de Exteriores del Parlamento Europeo.


