El líder de KISS, Gene Simmons, respaldó esta semana la ofensiva de la Casa Blanca contra la inmigración ilegal, durante su visita a Washington para una serie de eventos que lo llevarán desde el Kennedy Center al Congreso.
Simmons, de 76 años, nacido en Israel y llegado a EE.UU. siendo niño, declaró al The Washington Post que los migrantes que buscan entrar al país deben esperar en fila como él lo hizo. “Hay leyes vigentes. Y si rompes la ley, eres un criminal. Inmigrantes ilegales, indocumentados… todo el mundo usa un término político”, dijo. “Un inmigrante ilegal es un criminal. Y entiendo que todos vienen de situaciones difíciles. Pero no vas a ganar ese argumento conmigo. Mi madre estuvo en un campo de concentración y toda nuestra familia fue exterminada” en el Holocausto, afirmó el roquero.
El músico se adentró en la política en un viaje relámpago donde testificará en el Senado sobre un “vacío legal” que, según él, está estafando a una nueva generación de músicos, incluidos sus propios hijos. El bajista y co-cantante principal de la banda icónica recibirá un premio en los Kennedy Center Honors el domingo junto a otros miembros originales sobrevivientes, y señaló que saludará al presidente Donald Trump, quien anunció a los galardonados en agosto.
Señaló que muchos migrantes a EE.UU. provienen de países gobernados por déspotas como Nicolás Maduro de Venezuela. “Sé que es duro, es muy duro. Pero tenemos un proceso y mi madre y yo esperamos años antes de que se nos permitiera entrar a América. El Sueño Americano está vivo”, dijo.
El músico criado en Queens se mostró cauteloso sobre otro estadounidense naturalizado, el alcalde electo socialista Zohran Mamdani, pero expresó estar dispuesto a darle margen. “Dale una oportunidad al tipo y veamos qué hace. Antes de las elecciones todo el mundo tenía muchas cosas que decir. Ha sido debidamente elegido por la población de Nueva York”, declaró, semanas después del sorprendente encuentro cordial de Trump en el Despacho Oval con el alcalde.
“Veamos qué hace. Los eslóganes y la investigación que he hecho sobre el hombre no me atraen. Pero Werner von Braun fue un ex nazi de la maquinaria de guerra nazi alemana… y lo primero que hizo América fue contratarlo”, dijo, refiriéndose a una figura clave del programa espacial estadounidense. “De hecho, cuando KISS salió de gira tocamos en el Von Braun Civic Center en Alabama”, recordó.
Simmons intentará persuadir a los legisladores cuando testifique ante un subcomité del Comité Judicial del Senado el 9 de diciembre sobre la Ley de Equidad Musical Estadounidense. “Pueden llamarme Sr. Locuaz”, bromeó.
“La música de América es la música del mundo. Nuestras estrellas son estrellas mundiales. Sorprendentemente, Elvis, Frank Sinatra, incluso nuestro compañero homenajeado George Strait, que será honrado en los Kennedy Center Honors, no reciben pago por las canciones que suenan en la radio. Esto es sobre artistas discográficos que simplemente nunca han sido pagados. Es una locura”, afirmó.
“¿Por qué es justo que la radio pueda ganar casi $14 mil millones este último año y los artistas que ponen en la radio reciban cero? ¿Cómo funciona eso?”, cuestionó. Reveló que su hija Sophie Simmons, quien escribió un éxito del K-pop y presenta su propia música, ha obtenido mil millones de reproducciones pero solo ha ganado $6,000.
“¿Crees que voy a permitir que la radio no pague a mis hijos? Sé dónde vives”, dijo, agregando una grosería.
Simmons afirmó que la legislación, que tiene patrocinadores bipartidistas, tiene una oportunidad real, aunque la industria ayudó a bloquear esfuerzos anteriores. “Conozco un poco al presidente. Pasamos algún tiempo juntos antes de que se volviera político. Él firmará esto”, aseguró.
El músico no confirmó su patrimonio neto cuando se le preguntó si había acumulado unos estimados $400 millones durante sus décadas en la industria musical. Él y sus compañeros de banda se enriquecieron a través de presentaciones y un auge de mercancías mientras KISS vendía 100 millones de discos. “Soy exitoso. Estaba pensando en comprar Rhode Island”, dijo en tono de broma.
El abstemio también dio una actualización sobre su accidente de SUV en octubre contra un auto estacionado en la Pacific Coast Highway en Malibu, diciendo que se debió a deshidratación. “Totalmente mi culpa. Ese día tuve reuniones desde las 7am hasta tarde en la noche… No bebí agua en todo el día. Y bebí mucho café. Se llama deshidratación”, explicó. “Todo está bien, el corazón está bien. Cerraron la carretera. Fue una locura”.
**REDACCIÓN FV MEDIOS**