Una iglesia de Illinois enfrenta críticas por exhibir un pesebre que representa al niño Jesús con las manos atadas con bridas plásticas y custodiado por figuras con el estilo de agentes de Inmigración y Control de Aduanas (ICE). La Iglesia Lake Street de Evanston muestra la escena en el exterior de sus instalaciones.
El niño Jesús está envuelto en una manta delgada que se asemeja al papel de aluminio, lo que, según la iglesia, hace referencia a las mantas de emergencia utilizadas en los centros de detención. Los centuriones enmascarados, oficiales del antiguo ejército romano, son representados con gafas de sol y chalecos verdes con la etiqueta “ICE”. También muestra a la Virgen María usando una mascarilla respiratoria “para protegerse del gas lacrimógeno”, según la iglesia. José también lleva mascarilla.
En una publicación de Facebook la semana pasada, la iglesia explicó que la instalación reinterpreta el pesebre como una escena de separación familiar forzada, estableciendo paralelismos entre la huida de la Sagrada Familia como refugiados y las prácticas modernas de detención de inmigrantes.
“Esta instalación reinterpreta el pesebre como una escena de separación familiar forzada, estableciendo paralelos directos entre la experiencia de refugiados de la Sagrada Familia y las prácticas contemporáneas de detención de inmigrantes”, dice la publicación. “‘La Sagrada Familia eran refugiados. Esto no es una interpretación política, esta es la realidad descrita en las historias que nuestra tradición ha contado y vuelto a contar durante milenios’, continúa. ‘Al presenciar esta historia familiar a través de la realidad que enfrentan los migrantes hoy, esperamos restaurar su filo radical y preguntarnos qué significa celebrar el nacimiento de un niño refugiado mientras rechazamos a aquellos que siguen los pasos de ese niño’.”
La iglesia, que también cuelga pancartas de Black Lives Matter y de justicia social, señaló que las bridas en las muñecas del bebé hacen referencia directamente a los niños que fueron atados con bridas por agentes durante una redada en un edificio de apartamentos de Chicago a principios de este año. La iglesia afirma que la mayoría de los residentes eran ciudadanos estadounidenses en ese incidente. Calificó la exhibición como un recordatorio contundente de que “el terror de la aplicación de la ley no discrimina por estatus migratorio”.
En los últimos días, según reportes, la máscara antigás de María ha sido removida, mientras que las bridas han sido cortadas de las manos del niño Jesús.
La publicación en Facebook y la exhibición generaron tanto críticas como elogios. “José y María fueron a Belén porque tenían que regresar a la ciudad ancestral de José para ser censados”, escribió una persona. “Entonces, Trump solo está siguiendo ese ejemplo y enviando a la gente a CASA según un requisito legal. Si quieren inmigrar LEGALMENTE, pueden llenar el papeleo antes de irse y auto-deportarse”.
“¡¡¡Blasfemia!!! Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen”, escribió otro. Un comentarista diferente argumentó que la iglesia había malinterpretado la Biblia: “La Sagrada Familia eran refugiados… ¿ustedes leen la Biblia? María y José viajaron según lo requerido por el censo de César, NO eran refugiados”.
Otros apoyaron la exhibición, con un usuario llamándola ‘arte muy poderoso’. “De toda la tragedia que afecta a mi comunidad, me alegra que se use arte poderoso para abordar los problemas de los que los trolls se burlan”, escribió una persona. “Esperando que salgan más exhibiciones como esta para provocar a las masas de manera positiva”.
La Iglesia Lake Street ha montado pesebres con temas políticos antes. En 2023, instaló una exhibición que mostraba al niño Jesús solo entre escombros como un homenaje a los civiles atrapados en la guerra en Gaza, según el Chicago Tribune.
El reverendo Michael Woolf, un ministro principal de la Iglesia Lake Street de Evanston, estuvo entre las 21 personas arrestadas el 14 de noviembre fuera de la instalación de procesamiento de ICE en Broadview, Illinois, según Patch.
**REDACCIÓN FV MEDIOS**