En un acontecimiento que ha conmocionado al sector de Brisas del Este en Santo Domingo Este, la Policía Nacional ha identificado a José Francisco Montero Encarnación como posible implicado en un incidente que resultó en la pérdida de una mujer y su hija adolescente. Según las autoridades, este suceso, que ha desatado una ola de preocupación en esta comunidad, fue descubierto cuando Berenise Morillo Morillo, hermana de la mujer fenecida, percibió que la puerta de la vivienda de sus familiares se encontraba entreabierta cuando los visitaba alrededor de las 2:00 de la tarde.
Dentro de la residencia, Berenise encontró el cuerpo sin vida de su hermana, María Morillo Morillo, de 45 años; y su sobrina, Elisabeth Ulloa Morillo, de 17, quienes presentaban varias lesiones que las autoridades atribuyen a un “objeto afilado”, según los informes preliminares. Además, una niña de siete años resultó herida en el mismo incidente, y actualmente recibe asistencia médica en un centro de salud cercano por lesiones corto-penetrantes que afectan sus brazos.
El vocero de la Policía Nacional, Diego Pesqueira, mencionó que aún se investigan los vínculos de Montero Encarnación con las víctimas, ya que los detalles del lazo entre ellos continúan siendo poco claros. Pesqueira aseguró que se ha activado un equipo del departamento de homicidios y del Ministerio Público para ahondar en este complejo caso que ha sacudido a los ciudadanos de la tranquila barriada. Investigadores especializados están trabajando de cerca con los vecinos de la localidad, recabando testimonios y recolectando todas las pruebas posibles para arrojar luz sobre el motivo y la secuencia de eventos que derivaron en este doloroso episodio.
El hallazgo de las víctimas ha resonado en la opinión pública, no solo por su trágico desenlace, sino por las características inusuales del acontecimiento. La comunidad ha expresado su consternación, pidiendo a las autoridades locales que intensifiquen sus esfuerzos para asegurar que las circunstancias que rodean estas pérdidas sean esclarecidas lo antes posible. Algunas organizaciones comunitarias han comenzado a presionar a los organismos de seguridad para que incrementen las patrullas en la zona y así prevenir situaciones similares en el futuro.
Las autoridades han comunicado que la Dirección del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (INACIF) será crucial para esta investigación, esperando que sus informes forenses proporciones detalles determinantes sobre la hora y las condiciones del incidente. Mientras tanto, se mantiene la atención en la recuperación de la menor que sobrevivió, cuya identidad permanece bajo confidencialidad para proteger su integridad.
En un despliegue inusual de transparencia, la Policía Nacional y el Ministerio Público han prometido actualizaciones continuas a medida que avancen en las indagatorias, apelando a la colaboración ciudadana para proporcionar cualquier información adicional que pueda ser útil en el esclarecimiento del caso. Este compromiso firme con la sociedad busca no solo resolver este lamentable evento, sino también restaurar un sentido de tranquilidad y seguridad entre los habitantes de la comunidad afectada.