En San Francisco de Macorís, fue apresado este viernes Andrés Tavarez en medio de un allanamiento, acusado de participar en múltiples robos. Al ser abordado por la prensa, el detenido se rehusó a ofrecer declaraciones sobre su situación. Durante la intervención, se reportaron tensiones entre los oficiales y familiares presentes en la vivienda.
La esposa del prevenido, identificada únicamente como Marleni, denunció un supuesto abus policial por parte de miembros del DICRIM. Según su relato, los oficiales no informaron sobre el motivo de la detención y se encontraban en el lugar una mujer embarazada y varios menores de edad, lo que generó preocupación entre los familiares sobre el procedimiento realizado en la residencia.
El abogado Juan José Lantigua, representante legal del detenido, se presentó en el Comando Regional Noreste de la Policía Nacional para acompañar al prevenido y supervisar que se respetaran sus derechos durante el proceso de detención y las diligencias relacionadas con el allanamiento. Las autoridades indicaron que la intervención se realizó como parte de investigaciones en curso sobre los robos que se le imputan al detenido.
“Él no ha tenido problemas con la justicia pero sí hay uno que lo tiene tragao. Él hace un mes fue agarrado en Cenoví, pero ahora llegaron, partieron la puerta con mis hijas adentro. No respetan que yo tengo un niño chiquito y una embarazada. Vivo en una casa alquilada y ahí tiene la puerta desbaratada”, dijo Marleni, quien aseguró su esposo no ha tenido problemas con la justicia.
“Para mí lo están mandando porque esto no es legal. Él tuvo un problema con un haitiano. Lo depuraron, pagó una fianza que le pusieron y lo enviaron a casa. Él está trabajando honradamente, mi esposo es mecánico”, agregó la esposa.
De manera preliminar, las autoridades informaron que durante el allanamiento se ocuparon varios objetos vinculados a la investigación. No se ofrecieron detalles adicionales sobre la naturaleza de los bienes incautados ni sobre la manera en que se relacionan con los hechos por los cuales Tavarez fue apresado. El procedimiento continúa bajo supervisión de las autoridades correspondientes para asegurar que se cumplan los protocolos legales.
El caso ha generado interés local, debido a las denuncias de los familiares sobre el supuesto trato inapropiado durante el allanamiento. Las autoridades afirmaron que se investigarán las circunstancias de la intervención para determinar si se cometieron irregularidades y garantizar la correcta aplicación de la ley. Mientras tanto, el detenido permanece bajo custodia mientras se desarrollan las diligencias pertinentes.
Se espera que en los próximos días se realicen audiencias y se presenten más detalles sobre los resultados del allanamiento y las investigaciones relacionadas con los presuntos robos. La Policía Nacional mantiene la vigilancia y el seguimiento del caso para esclarecer todos los aspectos involucrados y garantizar el debido proceso en favor de las partes afectadas.