La etapa de Brian Kelly en LSU comenzó con grandes expectativas, pero incluso el entrenador reconoce que no logró cumplirlas. Kelly, despedido tras la derrota ante Texas A&M en medio de un inicio de temporada de 5-3, ofreció su primera reacción pública tras su destitución.
‘Este viaje comenzó con grandes expectativas y mi propia visión de cómo llegar allí’, declaró Kelly en un comunicado publicado en redes sociales el jueves. ‘A veces el viaje no termina como esperamos’.
La gestión de cuatro años de Kelly concluyó con un récord de 34-14, y sus equipos estuvieron muy por debajo de las expectativas de campeonato nacional.
‘Las derrotas siempre dolerán, pero recordaré todas las victorias’, escribió. ‘No necesito contarles lo especiales que son las noches de sábado en el Tiger Stadium. Me siento honrado de haber vestido los colores púrpura y dorado y haber sido parte de esto’.
A Kelly le corresponden 54 millones de dólares como parte de su indemnización, un tema que contribuyó a la destitución del director deportivo de LSU, Scott Woodward. Sin embargo, en un correo electrónico dirigido a la directiva universitaria, el entrenador manifestó su disposición a negociar un acuerdo.
‘Como discutimos en nuestra reunión, estoy abierto a su deseo de llegar a un acuerdo sobre lo que me corresponde según el contrato, aunque, por supuesto, tendría que tener sentido financiero’, señaló en su correo del 26 de octubre.
LSU ascendió al director deportivo interino Verge Ausberry al puesto permanente a principios de esta semana, mientras que Frank Wilson asumió la dirección del programa de fútbol como entrenador interino.
‘Mientras todos se dirigen a ver jugar a los Tigers, deseo al entrenador Wilson, a los entrenadores y a nuestros jugadores lo mejor este fin de semana’, expresó Kelly en su declaración. ‘Sé que harán lo mejor para ellos y para LSU. Estaremos mirando y animándolos. Este viaje puede haber terminado, pero es una experiencia que permanecerá conmigo y con mi familia para siempre’.
**REDACCIÓN FV MEDIOS**