La Asociación Médica Dominicana (AMD), fundada el 18 de agosto de 1891, evolucionó hasta convertirse en el Colegio Médico Dominicana(CMD) en 2003 a través de la Ley 68-03, la cual le otorgó personería jurídica y autonomía. Hoy 22 años después, la comunidad médica no siente conexión, ni representación, lo que se refleja con poca participación en las actividades del gremio, distanciamiento de las sociedades médicas y la baja votación en sus procesos de selección interna que promedian solo el 20% de su matrícula.
La falta de institucionalidad y actualización del gremio ha generado una corriente de cambio que va, desde un modelo de gestión agotado, que, si bien puede exhibir algunos logros, a la apertura de un nuevo ciclo.
Sin embargo, más que una entidad científica, plural y participativa comprometida con promover un ejercicio de la profesión médica con carácter humano, el Colegio Médico Dominicano se maneja como un sindicato, ajeno y distante de la modernización, la institucionalidad, e incapaz de exhibir un plan integral teniendo como eje fundamental el bienestar económico y social de los médicos y el derecho a la salud de la sociedad.
Ante esa realidad se ha estructurado un bloque que propone a la Dra. Yuberkis Aquino para presidir el Colegio Médico, un bloque histórico que aglutina 23 de 26 movimientos de apoyo; cinco de nueves ex aspirante a presidir el CMD declinaron para apoyar a la Dra. Aquino; además, cuatro ex presidente y 14 miembros de la junta directiva nacional. Un bloque sin precedente que promueve la necesaria transformación del Colegio Médico Dominicano que proyecta el triunfo de la Dra. Yuberkis Aquino el próximo 12 de noviembre.
La Dra. Aquino propone un pacto por un Colegio Médico Dominicano del siglo XXI, con un Plan Estratégico Institucional por la necesaria transformación del gremio, que permitirá la planificación y ejecución de planes, proyectos, conquistas y reivindicaciones a corto, mediano y largo plazo, elevar el orgullo de pertenecer al Colegio Médico Dominicano que promueva el bienestar, el desarrollo académico y científico de los médicos, y por supuesto, fortalecimiento de la calidad técnica y humana de los servicios de salud. Por lo que concluimos que la necesaria transformación del Colegio Médico Dominicano tiene rostro de mujer: la Doctora Yuberkis Aquino.