Cuando Rakeem Nunez-Roches observó por primera vez a Brian Burns durante los entrenamientos voluntarios de primavera, notó inmediatamente su atención meticulosa al detalle, técnica refinada y determinación por ganar cada repetición.
“Y cuando llegó al campamento de entrenamiento, seguía haciendo lo mismo”, afirmó Nunez-Roches. “Todo está encajando perfectamente. Siempre le digo: ‘Oye, hermano, ¿estás buscando conseguir ese premio al Jugador Defensivo del Año, eh?'”
Efectivamente, Burns no oculta su aspiración de llevarse el máximo honor individual para un jugador defensivo en la NFL. Sin embargo, surge la pregunta sobre si le afecta el hecho histórico de que jugadores de equipos con malos registros —sus Giants tienen marca de 2-6 y se encaminan hacia una tercera temporada consecutiva con doble dígito de derrotas— rara vez reciben este reconocimiento.
“Significaría muchísimo para mí”, confesó Burns. “La forma en que planteas esa pregunta es acertada —lamentablemente. Solo puedo hacer lo que está en mis manos. El resultado final dependerá de cómo se den las circunstancias. Al menos tendré la certeza de que no me quedaré con arrepentimientos cuando termine la temporada”.
**REDACCIÓN FV MEDIOS**