Redacción.- El huracán Melissa ha golpeado con fuerza la parroquia de St. Elizabeth, el corazón agrícola de Jamaica, causando estragos significativos en la región. En medio de un panorama desolador, las inundaciones y los vientos huracanados han destruido techos y derribado árboles, dejando a la población enfrentando una situación crítica.
Las autoridades locales han emitido una alerta máxima y están instando a todos los residentes a permanecer en sus hogares mientras el huracán continúa su avance a lo largo de la costa sur de la isla. La prioridad ahora es garantizar la seguridad de los habitantes y minimizar el impacto del meteoro.
El fenómeno se mueve hacia el norte-noreste a 13 km/h y se espera que cruce Jamaica durante las próximas horas, antes de dirigirse al sureste de Cuba y posteriormente al centro de las Bahamas, donde también rigen advertencias de huracán.
El NHC advirtió sobre marejadas ciclónicas potencialmente mortales de hasta 13 pies (4 metros) en la costa sur de Jamaica, así como lluvias torrenciales de entre 15 y 30 pulgadas (hasta 76 cm), que podrían causar inundaciones catastróficas.
Se prevé que Melissa mantenga su fuerza extrema mientras se aleja de Jamaica y continúe representando una amenaza significativa para Cuba y las Bahamas en las próximas horas.


