DocGo, un contratista médico que anteriormente se había especializado en pruebas de Covid, recibió el año pasado un contrato sin licitación por 432 millones de dólares para brindar atención a inmigrantes recién llegados a la ciudad y en otras partes del estado.
“Nunca habían proporcionado servicios significativos a los solicitantes de asilo, ni a refugios, ni servicios jurídicos. Era una empresa de servicios médicos y dotación de personal. Había preocupaciones reales sobre la integridad de sus subcontratistas y había preocupaciones reales sobre si la ciudad estaba obteniendo el mejor precio”, dijo Brad Lander, Contralor de la ciudad.
Este lunes se dio a conocer por parte de la administración Adams que en vez de renovar el contrato con DpcGo, se abrirá una licitación para encontrar una empresa adecuada que continúe ofreciendo servicios a dicha población.
Sobre la contratación, desde julio del año pasado, la contraloría de la ciudad se había opuesto y se tiene una auditoría en curso que ha revelado presuntas fallas en el proceso de adjudicación del contrato, así como pruebas insuficientes de que los subcontratistas de la empresa habían sido debidamente examinados.
“La ciudad acudió a nosotros porque Docgo estaba pidiendo un adelanto en efectivo de 4 millones de dólares, que no habíamos dado a ningún otro proveedor de servicios para solicitantes de asilo. Eso fue una alarma desde el principio. ¿Por qué querían 4 millones de dólares por adelantado que no le hemos dado a ningún otro?”, agregó el contralor.
“Mi oficina hizo sonar repetidamente la alarma sobre lo mal preparado que estaba DocGo para brindar servicios adecuados a los solicitantes de asilo.
“Después de meses de advertencias sobre la selección de este proveedor y su desempeño, me siento aliviado de que la Administración haya entrado en razón”, escribió además el contralor en un mensaje en redes sociales.
My office repeatedly sounded the alarm on how ill prepared DocGo was to provide adequate services to asylum seekers.
After months of warnings about the selection of this vendor and its performance, I’m relieved that the Administration came to its senses. https://t.co/9heWGTBPTo
— Office of New York City Comptroller Brad Lander (@NYCComptroller) April 9, 2024
Luego quedó claro que su subcontratista de seguridad no tenía las licencias adecuadas.
Sobre esto último, han habido siempre muchas quejas. Docgo, además se encargaba de proveer alimentos a la población.
“Al personal de seguridad si le falta un poco más de experiencia, el personal de lo que es ayuda, ayuda social, lo que es atención a nosotros mismos en alguna cuestión que necesitamos. Si les hace falta un poco más de entrenamiento, un poco más de eficacia”, dijo Edison Chicaiza, un solicitante de asilo.
“Por lo menos yo soy uno que no como esa comida. Mi esposa tampoco se la come. Entonces compro en la calle mejor”, agregó Jorge Jiménez, otro solicitante de asilo.
La contraloría considera que organizaciones que ya han trabajado con refugiados y población de inmigrantes, incluso organizaciones sin ánimo de lucro son las que deben atender las necesidades de los solicitantes de asilo.
Y mientras que encuentran un nuevo proveedor, la ciudad trabajará con la empresa Garner con quien tiene un contrato vigente y temporal, esperan tener a un nuevo contratista en un periodo máximo de 3 meses.
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