Una mujer fue detenida en Israel bajo sospecha de haber ocultado el cadáver de su madre, una superviviente del Holocausto de 93 años, durante más de un año, según informa Ynet. Las autoridades policiales consideran que el motivo fue económico, ya que la hija habría continuado percibiendo los aproximadamente 5.000 dólares mensuales que la anciana recibía como compensación del Estado israelí y de Alemania.
Maina Tolstikov fue reportada como desaparecida a principios de septiembre por otra de sus hijas, con quien no mantenía contacto desde hacía dos años, después de que esta última recibiera versiones contradictorias sobre el estado de salud de su madre.
El inspector jefe del caso, Alon Reuveni, describió que el apartamento de la anciana se encontraba lleno de telarañas y con las ventanas selladas. Sharon Kantor, hija de la fallecida y principal sospechosa, fue localizada en las inmediaciones junto a su pareja. Durante los interrogatorios por separado, sus versiones resultaron inconsistentes.
La pareja fue arrestada tras proporcionar testimonios divergentes sobre las circunstancias del fallecimiento. Ambos reconocieron que Tolstikov había muerto en abril de 2024, pero alegaron que la habían sepultado en otra localidad debido al conflicto bélico en Gaza.
Mientras Kantor afirmaba que su madre había sido enterrada en Haifa, su pareja declaró haberla sepultado en un kibutz del norte de Israel, aunque se negó a especificar la ubicación exacta.
Los investigadores sostienen que la pareja, ambos mayores de 60 años, habría seguido percibiendo durante más de año y medio la pensión que Israel y Alemania transferían mensualmente a Tolstikov.
En un giro dramático, el compañero sentimental de Kantor se suicidó en su celda después de confesar que había sido él quien enterró a Tolstikov, llevándose consigo el secreto de la localización del cadáver.
La investigación experimentó un estancamiento temporal hasta que un contratista que había trabajado en la vivienda de los implicados aportó información crucial al revelar haber observado un pozo de considerable profundidad en el patio de la propiedad.
Este hallazgo permitió a la Policía localizar el cadáver el 30 de septiembre, sepultado a tres metros de profundidad en el patio y envuelto en una tela.
«La investigación determinó que la hija y su pareja mantuvieron el cuerpo en un antiguo congelador de helados situado en su patio durante dos días antes de decidir enterrarlo», explicó el investigador principal.
Sharon Kantor permanece bajo investigación en espera de los resultados de la autopsia. Se enfrenta a múltiples cargos que incluyen fraude agravado, obstrucción a la justicia, omisión del deber de reportar un fallecimiento e incumplimiento de obligaciones legales.
REDACCIÓN FV MEDIOS