Santo Domingo.- La inteligencia artificial (IA) está tejiendo su red en el tapiz de nuestra vida cotidiana con una velocidad y eficacia impresionantes. Según las estadísticas más recientes, la IA está configurada para ser el núcleo de una transformación global sin precedentes.
Un informe de Canalys proyecta que para 2028, las ventas de PC equipadas con IA alcanzarán los 205 millones de unidades, marcando una tasa de crecimiento anual compuesta del 44% entre 2024 y 2028. Esta cifra no solo refleja la adopción masiva de IA en la tecnología personal sino también su integración omnipresente en nuestras vidas profesionales y recreativas.
El gigante tecnológico Samsung Electronics, recientemente presentó la nueva serie Galaxy S24, así como otros dispositivos con novedosas funcionalidades de IA, que están redefiniendo la interacción entre los usuarios y sus actividades diarias.
«La IA está cambiando fundamentalmente la manera en que interactuamos con nuestros dispositivos. Ya no somos solo usuarios, sino colaboradores en una experiencia compartida con la tecnología que nos rodea», aseguró Zezinho Lee, presidente de Samsung Centroamérica y el Caribe. Esta colaboración promete una vida más conectada y personalizada, donde los dispositivos anticipan nuestras necesidades y aprenden de nuestras preferencias.
Por su parte, Acer se hace eco del entusiasmo por el futuro de las laptops con IA. «La integración de la IA en nuestras laptops está cambiando el juego», comenta Germano Couy, gerente general de Acer para Latinoamérica. «No solo estamos hablando de máquinas más rápidas y eficientes, sino de dispositivos que se adaptan y responden al comportamiento individual del usuario, optimizando la experiencia desde todos los ángulos».
Según las estadísticas más recientes, la IA está configurada para ser el núcleo de una transformación global sin precedentes. Un informe de Canalys proyecta que para 2028, las ventas de PC equipadas con IA alcanzarán los 205 millones de unidades, marcando una tasa de crecimiento anual compuesta del 44% entre 2024 y 2028.
Jim Chappell, director global de IA de AVEVA, empresa líder mundial en software industrial, proporciona una perspectiva equilibrada sobre las capacidades de la IA. «A pesar del progreso exponencial en la IA, aún estamos lejos de replicar el pensamiento creativo humano y la comprensión contextual», dice. «Sin embargo, la IA puede mejorar significativamente la eficiencia y calidad en las funciones industriales, contribuyendo a procesos más eficientes, reducción de costos y apoyo a la sostenibilidad».
Luego de más de más de 30 años trabajando con IA, Jim Chappell cree firmemente que la adopción de opciones de IA proporcionará la mejor manera posible de llevar a cabo cada escenario, “pero la decisión final a menudo requiere la intervención humana. Los grandes modelos de lenguaje pueden sugerir la mejor estrategia, los expertos humanos tendrán que ponerlos en práctica”.
El impacto de la inteligencia artificial es amplio y abarca todos los escenarios posibles: el sector de la salud puede permitir diagnósticos más precisos, planes de tratamiento personalizados e incluso asistir en procedimientos quirúrgicos, mejorando potencialmente los resultados y salvando vidas. En el transporte, el análisis impulsado por IA puede optimizar el flujo de tráfico, mejorar las características de seguridad de los vehículos autónomos y racionalizar la logística para reducir costos e impacto ambiental.
En el ámbito de la investigación, la capacidad de la IA para procesar y analizar enormes conjuntos de datos supera las capacidades humanas, acelerando los descubrimientos en campos que van desde la ciencia del clima hasta la física teórica.
«La IA nos permite analizar datos a una escala y velocidad que antes era impensable, lo que transforma cómo entendemos y nos conectamos con nuestro público», añade Julissa Nova, CEO de Prism Group, empresa de relaciones públicas. «Con la IA, estamos viendo una era de hiperpersonalización y análisis predictivo que puede transformar cómo las marcas se comunican y se relacionan con su audiencia, anticipando necesidades y respondiendo en tiempo real a los cambios del mercado.»
Mirando hacia el futuro, podemos esperar que la IA se convierta en una fuerza transformadora a nivel general. Más allá de las mejoras en eficiencia y productividad, la IA tiene el potencial de enriquecer nuestra comprensión del mundo y fortalecer nuestras capacidades humanas. Nos encontramos al borde de una nueva era donde la colaboración entre humanos y máquinas inteligentes puede llevarnos a descubrir nuevas fronteras en ciencia, arte y sociedad. La IA no está solo cambiando nuestras herramientas; está expandiendo lo que significa ser humano.
