Este fin de semana no hay Fórmula 1, pero la rivalidad entre McLaren F1 y Mercedes sigue viva… aunque esta vez no será sobre el asfalto, sino sobre el césped.
A las 16:00 (hora peninsular) de este sábado se enfrentan en la FA Cup —la copa más antigua y emblemática del fútbol inglés— el Woking Football Club y el Brackley Town FC, dos equipos modestos de la National League (la quinta división inglesa). Hasta aquí todo normal, si no fuera porque Woking es la ciudad donde McLaren tiene su sede y Brackley es el hogar de Mercedes. O lo que es lo mismo: un McLaren–Mercedes en versión futbolera.
Las redes, por supuesto, no han tardado en convertirlo en una broma compartida. La cuenta oficial de la FA Cup promocionó el partido con una imagen digna del Gran Premio de Wembley: un McLaren y un Mercedes aparcados en mitad de un campo de fútbol, con los escudos de ambos clubes al estilo de un cartel de carrera. “McLaren vs Mercedes”, titulaban, y los propios equipos se sumaron al juego en redes.
El Woking FC, por ejemplo, aprovechó el último Gran Premio de Singapur para calentar motores (o piernas) recordando que pronto se enfrentarían a “Mercedes”, es decir, al Brackley Town. Y lo hicieron justo el fin de semana en que McLaren celebraba su título de campeones del mundo de constructores de F1 2025. Casualidad o no, espíritu competitivo no les falta en la ciudad de la escudería liderada por Zak Brown.
Por su parte, el Brackley Town también tuvo su momento de gloria hace unas semanas, cuando felicitó a George Russell por su victoria en Singapur, que devolvía a Mercedes al escalón más alto del podio.
Ahora, ambos equipos —y por extensión, ambas fábricas— vuelven a cruzarse. En lo deportivo, Woking llega 18º en liga y Brackley 16º, separados solo por dos puestos. En la comparación automovilística, McLaren va por delante este año, aunque Mercedes todavía sabe cómo dar un golpe de autoridad cuando menos se espera.
El duelo pertenece a la cuarta ronda clasificatoria de la FA Cup, una fase que da acceso a los equipos de divisiones inferiores al cuadro principal del torneo. Y aunque ninguno de los dos clubes tiene a Lando Norris o a Andrea Kimi Antonelli en su once inicial, el simbolismo está claro: el clásico moderno de la F1 se muda por un día a un campo de fútbol inglés. Así que, mientras los motores descansan, la pelota rueda. Y en Woking y Brackley, seguro que más de un mecánico estará pendiente del marcador.
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