Queridos lectores, sé que Oscar Piastri ya tuvo problemas para dormir después del Gran Premio de Azerbaiyán. Pero, al igual que mi colega Christian Nimmervoll lo pensó después de Bakú, yo pienso lo mismo ahora después de Singapur: Piastri habrá tenido otra noche muy agitada. Su comportamiento cauteloso y reservado ante los medios de comunicación no cambia nada.
No hay duda: algo se está cociendo dentro de Piastri.
Por un lado, la situación con Lando Norris justo después de la salida, que desde su punto de vista no sólo fue desafortunada, sino injusta.
Por supuesto, se puede discutir ese punto de vista. Pero lo que me parece innegable es que Piastri debe sentirse cada vez más engañado. Porque siempre parece que él es el que tiene que asumir el golpe – y Norris es el que se beneficia. Véase Monza.
Y aunque el jefe del equipo, Zak Brown, y el director, Andrea Stella, lleven meses repitiendo como un mantra que ambos pilotos de McLaren tienen las mismas oportunidades y que la equidad es primordial, las dudas aparecen inevitablemente en estos momentos.
Piastri, por supuesto, conoce todos los acuerdos internos y podrá valorar correctamente situaciones como las de Monza o Singapur. Pero eso no borra la impresión de “¿Por qué siempre yo?” Con cada nuevo caso, crece su frustración y su preocupación de que quizá, sólo quizá, Norris esté siendo realmente favorecido.
La brecha entre Norris y Piastri se reduce
Por otra parte, la ventaja de Piastri en la clasificación de pilotos es cada vez menor: con su victoria en Zandvoort y el abandono de Norris, había acumulado un colchón de 34 puntos, su mayor margen hasta la fecha.
Oscar Piastri, McLaren
Foto: Steven Tee / LAT Images vía Getty Images
Pero esa ventaja se está desmoronando, semana tras semana: en Monza se redujo en tres puntos, en Bakú en seis, en Singapur en otros tres – y en dos de esas tres carreras, incidentes polémicos desde la perspectiva de Piastri jugaron un papel decisivo. Eso es suficiente para que cualquiera se lo piense dos veces.
Porque Norris se está acercando, paso a paso: si continúa la actual tendencia de puntos desde Monza, Piastri perderá este campeonato a manos de Norris, por dos puntos.
Y luego está Max Verstappen, todavía al acecho como una amenaza invisible: 10 puntos ganados en Monza, 25 en Bakú, seis en Singapur… los números recientes de Piastri contra él también son claramente negativos.
¿Cómo responderá Piastri?
Esto no dejará indiferente a Piastri, ¿cómo iba a hacerlo?
Y si la tendencia actual en la clasificación del campeonato no le quita el sueño, entonces seguramente sí lo haga la cuestión de cómo debe enfocar ahora su batalla interna en el equipo con Norris.
Especialmente después de Singapur, espero algún tipo de reacción por parte de Piastri: una declaración en la pista, ya sea a través de una actuación sobresaliente al volante o a través de un comportamiento intransigente rueda a rueda contra Norris. Porque lo que Piastri necesita desesperadamente ahora mismo es un punto de inflexión, también para su propia confianza en sí mismo.
Y seamos sinceros: ¿quién podría dormir tranquilo en esta situación, a punto de conseguir quizás el mayor éxito de su carrera? Yo, desde luego, no. Y creo que Piastri tampoco.
Atentamente, Stefan Ehlen
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