Frente a una muchedumbre, en una calle céntrica del barrio San José de Los Campanos, Cartagena de Indias, Bolívar, Colombia, quedó el cuerpo de Harold Junior Escobar Peinado. Un sicario lo mató de cuatro balazos en un atentado que ocurrió en la tarde de este jueves 18 de septiembre en el suroccidente de Cartagena.
Escenas desgarradoras se vivieron a partir de las 5:30 p. m., en plena vía pública, cuando al sitio de los acontecimientos llegaron los familiares de la víctima. Harold aún agonizaba y un hombre que parecía ser su padre trataba de reanimarlo, presionando su pecho y luego su espalda.
Frente a la mirada atónita de una comunidad que no sabía qué hacer, aquel hombre hacía lo imposible para que Harold resistiera. Poco después, funcionarios de la Policía y de Criminalística de la Sijín confirmaron que por Harold no había nada que hacer. Lo más de cuatro balazos que recibió, dos de estos en la cabeza, fueron certeros y mortales.
Tras acordar la escena del crimen, frente a dos conocidos supermercados de cadena y ante una muchedumbre que grababa con sus celulares aquellos impactantes y dramáticos momentos, los miembros de Seccional de Investigación Criminal de la Policía Metropolitana de Cartagena realizaron la inspección judicial al cuerpo, para luego trasladarlo a la morgue de Medicina Legal, en donde permanece en la mañana de este viernes.
En un reporte oficial, la Policía informó que a Escobar Peinado, de 28 años, le figuraba una anotación judicial en el Sistema Penal Oral Acusatorio (SPOA) por el delito de porte ilegal de armas de fuego (2023).
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