Una familia acusa a un hospital privado de la capital pernambucana, Brasil, de haber cometido un presunto error médico que, según sostienen, provocó el fallecimiento de su hijo de un año y diez meses, identificado como João Miguel Alves da Silva.
El menor había sido ingresado el 6 de enero de este año en el Hospital General Maternoinfantil (HGMI) tras presentar vómitos recurrentes.
Los exámenes iniciales, incluida una radiografía, confirmaron un cuadro de neumonía, por lo que fue trasladado a la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI).
Durante la internación, la cirujana Ila Fernandes realizó un acceso venoso central, procedimiento en el que se inserta un catéter en una vena del tórax para la administración de medicamentos.
Horas después, el niño presentó complicaciones graves y se detectaron perforaciones en ambos pulmones, lo que derivó en su fallecimiento en las instalaciones de Unimed Recife.
El padre de la víctima, empleado del hospital como camillero, declaró que antes de la intervención expresó dudas sobre la realización del procedimiento dentro de la UCI.
Según su testimonio, la familia entendía que la práctica debía llevarse a cabo en un quirófano. La especialista, sin embargo, habría asegurado que la unidad contaba con la infraestructura necesaria para el procedimiento.
La Policía Civil de Pernambuco informó que el caso se encuentra en etapa final de investigación para determinar las responsabilidades.
Por su parte, la red hospitalaria Unimed afirmó que sigue protocolos técnicos rigurosos y reiteró su compromiso con la seguridad de los pacientes.


