Lamentable final de una joven

Una joven brasileña de 28 años, identificada como Marilha Menezes Antunes, falleció este lunes tras sufrir un paro cardiorrespiratorio durante una cirugía estética en una clínica privada del barrio Campo Grande, en la zona oeste de la ciudad.

El procedimiento correspondía a una liposucción con injerto de glúteos, que la paciente había elegido como regalo de cumpleaños, apenas días después de haber cumplido años el 1 de septiembre.

Según declaró su hermana Carolina Menezes al medio local g1, Marilha era una persona saludable, con estudios médicos recientes en regla, y había pagado cerca de R$ 5.000 (unos 900 dólares) por la intervención.

La familia acusa a la clínica Amacor de negligencia y demora en la asistencia, señalando que el centro no contaba con recursos suficientes para emergencias críticas. De acuerdo con el reporte policial, el médico responsable informó que la paciente sufrió una broncoaspiración seguida de un paro cardiorrespiratorio. La ambulancia fue solicitada cuando la situación ya se había agravado, lo que, según la familia, redujo las posibilidades de salvar su vida.

Carolina relató que al ingresar al quirófano vio al cirujano practicando maniobras de reanimación y pidiendo oxígeno, en una escena de profundo dramatismo. El Servicio de Atención Móvil de Urgencia (SAME) confirmó que recibió el llamado a las 18:13 horas. A pesar de los 90 minutos de intentos de reanimación, Marilha no sobrevivió. El caso fue registrado en la 35ª Comisaría de Policía de Campo Grande y remitido al Departamento de Defensa del Consumidor (Decon), que abrió una investigación formal.

El Instituto Médico Forense (IML) emitió un informe preliminar señalando como causa del deceso una combinación de fuerza contundente y hemorragia interna.

La joven, que había buscado cumplir un sueño estético, dejó a un hijo de seis años. “La llevé para cumplir un sueño y murió”, expresó su hermana con pesar ante los medios. En un comunicado oficial, la clínica Amacor afirmó que funciona bajo el modelo de One Day Clinic, es decir, que únicamente provee las instalaciones para que equipos médicos externos realicen procedimientos.

La institución aseguró que su quirófano está equipado con desfibrilador bifásico, carro de paro completo y equipos de soporte vital, negando la versión de que no hubiera recursos adecuados.

Añadió que las maniobras de reanimación se iniciaron “de inmediato” siguiendo protocolos internacionales y se comprometió a colaborar plenamente con las autoridades.

Este martes, inspectores del Consejo Regional de Medicina de Río de Janeiro, junto con agentes de Defensa del Consumidor y personal de Vigilancia Sanitaria, realizaron una inspección en la clínica para verificar las condiciones de operación y constatar el cumplimiento de las normas.

En un comunicado, la clínica Amacor lamentó lo sucedido y aclaró que funciona como una “One Day Clinic”, es decir, solo brinda la infraestructura para que equipos médicos externos realicen procedimientos.

“La AMACOR lamenta profundamente el fallecimiento de una paciente tras complicaciones en una cirugía estética ambulatoria realizada por un equipo médico externo en nuestra clínica”, expresaron en la nota.