Mercedes no ha tenido el viernes más prometedor en el Gran Premio de Italia de Fórmula 1 2025. En un circuito de baja carga aerodinámica como Monza, donde McLaren F1, Ferrari e incluso Williams marcaron el paso, las flechas de plata se vieron algo más atrás de lo esperado en la tabla de tiempos.
En la primera sesión, George Russell solo pudo ser octavo, mientras que Andrea Kimi Antonelli, ante su afición, arrancó con una meritoria quinta plaza que parecía resarcirle del error cometido en Zandvoort una semana antes. Sin embargo, el italiano volvió a vivir un día complicado: en los Libres 2 perdió el control de su monoplaza, se fue a la grava y se quedó fuera de la mayor parte de la sesión. Por su parte, Russell terminó décimo, a cuatro décimas del mejor tiempo de Lando Norris, una diferencia que en Monza es significativa.
El británico admitió que no tuvo las mejores sensaciones con el coche.
“Fue un día complicado en Monza, vuelves a esa carga aerodinámica baja y el coche va un poco flotando, con la parte trasera muy suelta. No se sintió espectacular ahí fuera para nosotros. Estuve P10 pero a solo tres décimas, normalmente estar a tres décimas de McLaren es una buena señal, pero aquí eso solo te da el décimo lugar. Está todo muy apretado y espero que mañana sea igual, seguro que podemos mejorar”, explicó Russell.
Preguntado por las áreas en las que el coche podría dar un paso adelante, el inglés reconoció que aún hay margen: “Es un poco extraño porque si estás a tres décimas de McLaren, normalmente estás en una buena posición. Aquí, en cambio, eso solo te deja en P10. No se sintió nada bien y tuve problemas de confianza, incluso algunos momentos parecidos a los de Kimi. Fue difícil mantener el coche bajo control. Mañana será un nuevo día, espero que mejore. El ritmo de carrera, sinceramente, parecía mejor, así que esa es la conclusión general”.
Antonelli, en cambio, trató de restar importancia a su error, aunque el incidente volvió a dejarle con menos rodaje del deseado en un fin de semana especial para él, corriendo en casa.
“Sí, apreté un poco más de lo que había de agarre en ese momento y fue una pena. El día estaba siendo positivo, hice una buena FP1 y el inicio de la FP2 también era prometedor, así que la confianza sigue alta. Mañana tendremos que hacer un programa diferente, pero intentaremos estar preparados para todo”, declaró el rookie italiano.
Mercedes, que suele sufrir más con las altas temperaturas, afronta el resto del fin de semana con la esperanza de dar un paso adelante en clasificación y en carrera, aunque de momento la batalla por el podio parece más lejana que para sus rivales directos.
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