Normalmente alguien de la talla de Fernando Alonso llama la atención allá donde va, pero este jueves lo hizo aún más en su llegada al Autodromo Nazionale de Monza. Y no, no fue por su pasado como piloto de Ferrari y la gran imagen que dejó entre los tifosi, que también, sino que el asturiano hizo abrir mucho los ojos a los allí presentes cuando se plantó en un raro Aston Martin Valhalla, valorado en aproximadamente un millón de dólares (más de 850.000 euros).
Ese Valhalla es el primer supercoche híbrido enchufable con motor central de Aston Martin, y nació del aprendizaje que el fabricante británico ha obtenido estos años en la F1. Está equipado con un motor V8 biturbo de 4,0 litros y cigüeñal plano y una transmisión de doble embrague de ocho velocidades, y desarrolla 1.064 CV y 1.098 Nm de par motor.
Se presentó en diciembre de 2024, y el propio Alonso participó de su debut mundial en mayo de este año, cuando lo pilotó en el Circuito urbano de Montecarlo antes de salir a disputar la FP1 del GP de Mónaco.
Tomando las inigualables credenciales de lujo de Aston Martin y añadiendo tecnología de vanguardia inspirada en la F1 y un rendimiento líder en su clase, puedo confirmar que el Valhalla es un auténtico supercoche tanto en carretera como en circuito”, dijo entonces Fernando Alonso. “Aparte de la potencia y la dinámica, ofrece todas las sensaciones y emociones que uno busca cuando se pone al volante de un coche como el Valhalla”.
Además, Alonso había seguido de cerca el proyecto durante los 18 meses que duró y trabajó junto al equipo de desarrollo, por lo que definió como “un momento fantástico” tanto para él como para Aston “desvelar la capacidad dinámica del Valhalla al mundo en el fin de semana del Gran Premio de Mónaco”.
“Añadimos a nuestra cartera el primer Aston Martin de producción en serie con motor central: el supercoche definitivo para el conductor. Sobre el papel y en la pista, el Valhalla es el supercoche más avanzado tecnológicamente y centrado en el conductor, con unas prestaciones de auténtico hipercoche y, sin embargo, en la carretera es tan manejable y agradable como cualquier Aston Martin. Una propuesta única, diseñada para ser el producto más elegante y emocionante del mercado”, dijo en su presentación Adrian Hallmark, CEO de Aston Martin.
Hallmark también se refirió a la influencia de Adrian Newey, la nueva superestrella de Aston Martin, que ya había estado involucrado con la marca con el Valkyrie: “Aprendimos a pensar de forma diferente desarrollando el hipercoche definitivo, el Aston Martin Valkyrie y trabajando con Adrian Newey. Ese conocimiento y la nueva metodología nos han permitido construir sobre las fortalezas de nuestros éxitos pasados y posicionar a Aston Martin como una compañía líder en su clase en tecnología, rendimiento y experiencia para nuestros clientes, que serán los custodios de esta nueva pieza de la historia de Aston Martin, el Valhalla”.
Como otros fabricantes, Aston ha añadido a sus coches más exclusivos la tecnología de vanguardia inspirada en la Fórmula 1, en una muestra más de la enorme relación que existe entre la pista y el asfalto.
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