Deion Sanders no permitió que nadie cuestionara su gestión del reloj ni a su cuerpo técnico días después de que Colorado perdiera 27-20 ante Georgia Tech el viernes por la noche.
Sanders tomó la decisión de guardar sus dos tiempos muertos en la posesión final de los Buffaloes con 1:07 restante, lo que resultó costoso, ya que la primera jugada consumió mucho tiempo y terminó en una pérdida de dos yardas.
Colorado llegó a la yarda 50 con el reloj en tres segundos después de que el receptor Isaiah Hardge saliera de los límites tras una recepción. El mariscal de campo titular Kaidon Salter lanzó el balón hacia la zona de anotación en la jugada final, pero el balón fue desviado.
“¿Llamas un tiempo muerto allí? No, estás justo ahí. No llamas un tiempo muerto allí. Tienes que ir. Tienes que ir. Estás corriendo tempo”, dijo Sanders el martes. “Todo tiene su propósito, a veces simplemente no sale como se supone que debe salir. Rezamos a Dios que salga bien esta semana”.
“Estamos tratando de arreglar lo que estaba roto la semana pasada y estamos en esta semana”, continuó Sanders. “Estuve allí hace unos días, pero ya me fui. Estoy en esta semana ahora”.
El inicio de 0-1 de la temporada para Colorado marca la primera vez que Sanders comienza una temporada de fútbol universitario como entrenador en jefe —tanto en Colorado como en Jackson State— con una derrota en el primer partido.
Sanders también desvió cualquier culpa del coordinador ofensivo Pat Shurmur y el coordinador defensivo Robert Livingston. “No perdimos el partido por el entrenador Shurmur, el entrenador Livingston o una cosa específica”, dijo Sanders. “Tengo que hacer un mejor trabajo”.
La leyenda de la NFL finalmente dijo que si su equipo hubiera “hecho las malditas jugadas, no estaríamos haciendo estas preguntas”.
**REDACCIÓN FV MEDIOS**