El US Open es uno de los eventos deportivos más importantes de la temporada generando millones de dólares para la ciudad de Nueva York.
Pero si bien la atención de los aficionados está centrada en los jugadores, el Abierto no sería posible sin el aporte de los miles de empleados temporales que trabajan tras bambalinas para asegurar que el torneo sea todo un éxito.
Spectrum Noticias entrevistó a un grupo de trabajadores cuyas labores comienzan antes del amanecer.
Son las 7 de la mañana y así luce la cancha 17 en el Centro Nacional de Tenis Billie Jean King en Nueva York.
Todavía faltan unas cuántas horas para que los aficionados comienzen a abarrotar las instalaciones del US Open. Pero mientras muchos fans siguen dormidos, una cuadrilla de trabajadores se asegura que todo esté listo cuando los tenistas pisen la cancha al dar inicio otra jornada del torneo.
“A mi siempre me ha gustado el tenis. A mi me gusta verlos jugando, me siento muy bien porque ayudo, me levanto temprano, me siento bien estando acá, si necesitan algo siempre los ayudo”, comentó Ashley Ochoa
Este es el primer año que Ashley participa como court attendant o trabajadora de mantenimiento de canchas en el Abierto de Estados Unidos, una labor que comienza desde las primeras horas de la mañana y se extiende hasta el último partido del día.
Su jefe, Rolando Díaz es todo un veterano del torneo. Comenzó a trabajar en el US Open cuando tenía apenas 16 años.
“Trabajaba en mantenimiento aquí vaciando los zafacones y eso fue en 1988, mi primer año.
Antes el US Open era mucho más pequeño. Y sobre los años abrieron Arthur Ashe Stadium, hicieron nueva construcción de Louis Armstrong y el Grandstand Stadium también”, recordó Díaz.
Con el paso de los años, Díaz fue ascendiendo de rango hasta ocupar su puesto actual como Coordinador de Instalaciones de la USTA. Ahora es el encargado de supervisar a cerca de 120 trabajadores que tienen la tarea de preparar las canchas y brindar ayuda a los tenistas durante las tres semanas del Abierto.
Muchos aficionados no están conscientes del trabajo que realizan ustedes porque se lleva a cabo antes de que comiencen los partidos. Qué entrenamiento, que requerimiento se necesita para hacer esta labor?
“Primero tenemos cinco días de entrenamiento para los nuevos empleados y tenemos que enseñarles como preparar una cancha para partido, preparar canchas para práctica y también les enseñamos a secar las canchas cuando llueve aquí”, explicó Díaz.
Esa labor se lleva a cabo también lejos de las canchas donde Ashley y sus compañeros como Sebastián Henao se encargan de conseguir las bebidas para los jugadores y preparar esa montaña de toallas que utilizan los tenistas profesionales y juveniles diariamente.
“Necesitas la capacidad de querer trabajar en el tenis porque se tiene que amar obviamente lo que se hace, tienes que seguir las reglas, tienes que ser responsable porque no sólo representamos nosotros mismos pero estamos representando al US Open y tenemos que actuar en una manera que es profesional”, subraya Sebastián.
Todo este trabajo es una culminación de por lo menos un mes de preparación. Díaz y su pequeño ejército, en su mayoría trabajadores temporales, ya se están alistando para estas tareas a principios de julio, aunque hay algunos empleados que comienzan a trabajar incluso desde abril.
“Me gusta ver la gente que trabajó el año anterior, porque ellos siempre vienen con mucho ánimo para trabajar el torneo y eso me da energía siempre”, dijo Díaz.
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