Lo que para muchos fue un simple gesto de cortesía —un saludo— le costó el empleo a Rafael Antonio Burgos Morillo, exempleado de la Alcaldía de Santo Domingo Norte. Burgos, que trabajaba como parqueador por un salario de apenas RD$ 8,000 mensuales, fue cancelado luego de que se hiciera viral un video donde saludaba al senador del Distrito Nacional, Omar Fernández.
Este jueves, visiblemente emocionado, Burgos visitó las instalaciones de El Nuevo Diario para agradecer a Dios y al propio Fernández, quien gestionó para él un nuevo empleo en una empresa privada. Ahora, ocupará el mismo puesto de parqueador, pero con un sueldo de RD$ 22,500, casi el triple de lo que recibía en el cabildo.
“Gracias a Dios y a Omar Fernández tengo un mejor empleo. Esto es una bendición que llegó en el momento justo”, expresó conmovido. Burgos es padre de dos hijos: uno de 14 años, que cursa la secundaria, y otro que está a punto de iniciar sus estudios universitarios. Su esposa se encuentra desempleada, y la familia enfrentaba fuertes limitaciones económicas debido al bajo ingreso que recibía.
El caso ha provocado reacciones encontradas en redes sociales y círculos políticos, reavivando el debate sobre la intolerancia y la politización de la vida laboral en República Dominicana. Para algunos, su despido es un ejemplo de cómo la rivalidad política puede escalar a un nivel en el que se penalizan las interacciones humanas más básicas, como un saludo. Para otros, es un recordatorio de que en el país todavía persisten prácticas clientelistas que condicionan las oportunidades de trabajo al alineamiento político.
Historias como la de Rafael Burgos revelan una dura realidad: en un país democrático, donde se presume que las diferencias ideológicas deben coexistir, todavía hay espacios donde un gesto cordial se interpreta como traición y se sanciona con la pérdida de sustento.
Su nueva oportunidad laboral es, sin duda, un triunfo personal y un alivio para su familia, pero también debería ser una llamada de atención para reflexionar sobre la necesidad de separar la política del pan de cada día.
Ver video:
Rafael Antonio Burgos Morillo, exempleado de la Alcaldía de Santo Domingo Norte, quien fue cancelado por saludar a Omar Fernández visitó las instalaciones de El Nuevo Diario para dar gracias a Dios y al senador del Distrito Nacional, Omar Fernández, por ayudarle a conseguir un… pic.twitter.com/fSWaE3d2wJ
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Un exempleado del Ayuntamiento Santo Domingo Norte (SDN) denunció que, por intercambiar un saludo con el senador del Distrito Nacional, Omar Fernández, fue desvinculado de dicha institución.
Rafael Antonio Burgos Morillo, quien laboraba como parqueador del Departamento de… pic.twitter.com/ECarWRVkcg
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