#Salud: El método poco conocido que usan los ladrones para entrar a tu casa

0
171


En los últimos años, la seguridad en los hogares se enfrenta a
un escenario complejo. Los robos en viviendas han dejado de ser
acciones ruidosas y evidentes. Frente a la constante mejora de
puertas y cerraduras, los ladrones han pulido técnicas capaces de
burlar estos avances, accediendo a domicilios sin causar destrozos
ni levantar sospechas.

Cómo funciona el método de la mirilla y su discreción

Detrás de una fachada tranquila puede esconderse un peligro casi
imperceptible. La base de este método es tan simple como
inquietante. El delincuente no necesita herramientas complejas para
emplearlo. Todo comienza con la mirilla de la puerta
principal de la casa
, ese pequeño dispositivo que muchos
propietarios pasan por alto. Si la mirilla no posee una
tapa interior de seguridad ni bloqueo específico,
el acceso al interior se convierte en un proceso fácil.

Los ladrones
utilizan destornilladores o alicates
comunes
para desenroscar la mirilla desde el exterior.
Esta acción se realiza rápido, sin grandes movimientos, evitando
cualquier marca o daño incierto en la puerta. Una vez retirada,
queda un agujero suficientemente grande para introducir un cable
fino o un gancho artesanal.

A través de este orificio, los asaltantes pueden acceder a la
manilla de la puerta desde el interior, especialmente si la puerta
no ha sido cerrada con llave. Basta un giro del mecanismo y el
acceso está logrado, todo en menos de tres minutos y sin hacer
ruido. No hay forzaduras ni ventanas rotas, por lo que el método
resulta imprevisible para los residentes y las propias autoridades,
dificultando la detección tras el robo.

La clave del éxito de esta táctica reside, además, en el
seguimiento previo. Los delincuentes vigilan los
horarios y rutinas de las víctimas, esperan el momento preciso en
que la casa queda vacía, y actúan cuando detectan que no habrá
testigos. En ocasiones, marcan la entrada con hilos transparentes,
pegamento o incluso trazos casi invisibles cerca de la cerradura.
Así, saben si alguien ha entrado o salido antes de cometer el robo.
El método de la mirilla combina discreción, rapidez y ausencia de
huellas, poniéndose a la cabeza de las técnicas preferidas en el
robo de viviendas.

Foto Freepik

Soluciones efectivas para prevenir robos mediante la
mirilla

Existen formas prácticas y fiables de bloquear la ruta de acceso
que usan los
ladrones
que recurren al método de la mirilla. La primera, y
más evidente, es no dejar nunca la puerta sin doble vuelta
de llave
. Las estadísticas muestran que la mayoría de los
robos ejecutados mediante esta técnica suceden cuando la cerradura
solo queda echada de la manera habitual, pero no asegurada a
fondo.

Salvaguardar la vivienda empieza por instalar mirillas
de seguridad
, que incluyen bloqueo interno y mecanismos
anti-manipulación. Hoy, existen incluso modelos electrónicos que
permiten registrar movimientos o detectar intentos de manipulación
desde el exterior. Incorporar una tapa interior en
la mirilla dificulta el uso de herramientas desde fuera, por lo que
cualquier intento de extraerla se vuelve imposible sin causar
ruido.

Te podría interesar:

Otra barrera útil es reforzar la cerradura con productos
certificados
, preferiblemente aquellos que cuentan con
mecanismos anti-bumping y anti-extracción. Las cerraduras de tres o
más puntos multiplican la resistencia ante intentos de apertura no
autorizada.

En el contexto de la vigilancia proactiva, instalar
cámaras inteligentes o timbres con vídeo aporta
una doble ventaja: disuasión y registro. Estos dispositivos no solo
capturan imágenes de quién se acerca a la puerta, sino que también
pueden enviar alertas al propietario en tiempo real, incluso si
este se encuentra fuera.

La colaboración vecinal es una defensa clave.
Fomentar que los vecinos presten atención a movimientos o vehículos
sospechosos y se comuniquen ante actividades extrañas añade una red
de protección comunitaria difícil de burlar. El apoyo entre
residentes puede marcar la diferencia durante ausencias largas o
vacaciones.

Resulta fundamental avisar a la policía sobre
cualquier marca extraña, presencia de vaselina en la mirilla,
microcámaras o cambios inesperados en la puerta. Los cuerpos de
seguridad cuentan con protocolos para reforzar la vigilancia en
zonas donde se detectan estos indicios y pueden evitar que los
delincuentes operen con libertad.

La prevención real surge de la combinación de estas acciones.
Junto a la tecnología y la protección física, la constancia
y la atención al detalle
reducen de forma significativa el
riesgo de sufrir un robo bajo el método de la mirilla o cualquier
otra táctica silenciosa que pueda surgir en el futuro.

¿Le resultó útil este artículo?



Source link